ESTRENO

nicolás lauber

Es licenciada en Literatura Comparada por la Universidad de Princeton, tiene un Master en Periodismo y un Doctorado en Filología Francesa y Romántica de la Universidad de Columbia. También es docente y, además, hija de la famosa pianista Martha Argerich y el director de orquesta Charles Dutoit. Pero Annie Dutoit-Argerich se define por los proyectos en los que está involucrada en el momento. Y hoy, sobre todo, es actriz.

Con esa faceta llega esta noche al Teatro Solís, con la obra ¿Quién es Clara Wieck? que inaugura la 80° temporada del Centro Cultural de Música. Va a las 19.30 y las entradas se venden por Tickantel, con precios entre 500 y 1.500 pesos.

"Nací en el mundo de la música entre dos monstruos, como Clara Wieck, que tenía a Robert Schumann y Johannes Brahms", dice a El País Dutoit-Argerich, quien desde enero realiza cinco funciones semanales de esta obra en el Teatro San Martín de Buenos Aires.

Con su acento afrancesado, Dutoit-Argerich cuenta que tuvo que huir de la sombra de sus padres y del mundo del arte para poder encontrarse. "Viniendo de una familia de artistas muy prominentes no quería estar en el escenario. Quería encontrar mi propia identidad. Lo hice a través de la academia, y cuando empecé a dar clases me sentí muy bien en el escenario del aula", recuerda.

¿Quién es Clara Wieck?, dirigida por Betty Gambartes y escrita en conjunto por Diego Vila y Gambartes, presenta la vida real de esta gran pianista, considerada la mejor del siglo XIX. Repasa la vida de una niña prodigio, la relación con su padre, su matrimonio con Schumann, la amistad con Brahms y su carrera como compositora.

"Ser hija de mi madre me dio acceso a la vida de una niña prodigio, entendiendo muchas cosas de la vida de Clara a través de ella. No tanto en el carácter, porque son personas muy diferentes, pero sí en la temática de la niña prodigio, de la vida de una solista y una persona que tiene que tener una carrera con muchas exigencias, y al mismo tiempo mantener una familia", dice.

Más allá de las comparaciones, la actriz no siente que haya un conflicto entre su vida y la obra que protagoniza. "Siento que estoy en el escenario haciendo una constelación familiar. Es un privilegio poder ser Clara Wieck", asegura.

"Quizás por la experiencia que tengo puedo darle una capa más auténtica a la obra, porque habla de mi vida, de la vida de mi madre a la que tuve acceso siendo niña, y a la música de Schumann. Por eso veo esta obra como una gran oportunidad y un desafío personal y artístico", dice.

El gran público puede no conocer a Clara Wieck, a pesar de que en sus inicios haya sido más famosa que los propios Schumann y Brahms. "Era muy conocida en Europa y uno se olvida, pero Schumann, para difundir su obra necesitaba una pianista, porque él no podía tocar por problemas con sus dedos. Ella lo ayudó a difundir sus trabajos y, tras su muerte, a cuidar su obra, y se olvidó de sí misma", explica la actriz. "Ella también componía, y un acierto de esta obra es que mostramos algunas de sus piezas".

En ese sentido, y a pesar de estar ambientada en el siglo XIX, la puesta dialoga con el presente y con la visión de la mujer de hoy. "Estamos en un momento muy importante de la mujer, pero todavía padece mucho más el conflicto entre maternidad y trabajo que el hombre. Aún hay un discurso muy fuerte de culpa hacia la mujer que elige trabajar", dice Dutouit-Argerich al respecto.

Pero ese no es el único elemento actual que aparece entre las líneas de ¿Quién es Clara Wieck? "También es relevante por todo lo que pasa en las redes sociales, donde la gente crucifica a cualquier persona sin saber la verdad. Eso me parece muy relevante y la obra habla de esto", explica su protagonista. "Si una obra de teatro puede hacer vibrar a la gente, hacerlos pensar en su presente, es muy bueno porque ese es el sentido del arte".

La programación del Centro Cultural de Música continúa este mes con la presentación de la Orchestre Philharmonique Royal de Liège que interpretará obras de Cesar Franck, Chopin y Tchaikovsky. El concierto será el 28 de junio a las 19.30 en el Teatro Solís.

La temporada continúa el 25 de julio con la presentación de la reconocida soprano Nadine Sierra y el pianista Kamal Khan en el Solís.

El 5 de setiembre el violinista Joshua Bell junto a la Academy of St Martin in the Fields se presentarán en el Auditorio Nacional Adela Reta con un programa que incluye piezas de Tchaikovsky y Beethoven.

La Orquesta Barroca de Venecia se presenta el 18 de setiembre en el Teatro Solís con obras de Veracini, Vivaldi y Geminiani/Corelli.

Mientras que el 19 de octubre la The Deutsche Kammer-Philharmonie

Bremen junto al violinista Christian Tetzlaff brindarán un programa que incluye a Mozart, Widmann y Brahms.

El Canadian Brass Quintet, el 3 de noviembre, y el pianista Benjamin Grosvenor (21 de noviembre) completan la programación de este año.