FINAL

No ha sido una temporada más la del Cantando 2020, que finaliza hoy y se podrá ver desde las 23.00 en La Tele. El miércoles, el actor Agustín “Cachete” Sierra se impuso en el voto telefónico ante Lissa Vera (que entró como reemplazo de Gladys “La Bomba Tucumana” cuando contrajo ?ovid), y se convirtió en el primer finalista del certamen. Ayer, la pareja de Ángela Leiva y Brian Lanzelotta se ganó el segundo lugar en la final del concurso que conducen Ángel de Brito y Laurita Fernández

Leiva es una de las mejores voces del certamen y este año recibió el Gardel a mejor disco tropical por La reina, se impuso a la otra semifinalista, Rocío Quiroz (quien entró para reemplazar a Leiva cuando contrajo Covid), también ha sido premiada, en 2016 y 2019 con el Gardel

Sierra en cambio surgió de la factoría Cris Morena (estuvo en Chiquititas, Rebelde Way y Casi Ángeles) y ha demostrado que lo suyo no es el canto, aunque dice divertirse del show.

Está claro que el 2020 fue un año difícil para la televisión. La pandemia del coronavirus cambió los planes de los canales y productoras, que tuvieron que reinventar formatos, suspender proyectos y pensar cómo entretener al público que no salía de su casa y miraba más la pantalla.

El plan inicial del canal argentino eltrece, estrenar una nueva temporada de Bailando, quedó por el camino, y se hizo resurgir al Cantando. La lógica es la misma aunque cambia la disciplina: famosos que, cumpliendo misiones solidarias, se animan a entonar canciones ante la atenta mirada del jurado. Y mientras algunos lo hacen bien como para llegar hasta instancias finales, otros logran generar cariño en el público y se convierten en imbatibles en el voto telefónico. Eso es lo que sucedió este año con Sierra.

No ha sido una temporada más del Cantando. Comenzó tarde, el 27 de julio, producto de las medidas sanitarias que exigía el gobierno argentino para las filmaciones. Y tuvo la notoria ausencia de Marcelo Tinelli en la conducción, aunque se encargó de marcar presencia desde sus redes sociales, dando su opinión en distintas instancias.

En 2020 hubo además “previas” interminables y devoluciones igual de largas donde los jurados hablaban, criticaban y contaban anécdotas. Los participantes recibieron un bajo puntaje muchas veces, no por el canto que en definitiva es lo importante, sino por cuestiones por fuera del concurso.

Con más polémicas y enfrentamientos que talento, la temporada tuvo de todo. Hubo renuncias de participantes -Miguel Ángel Rodríguez, de hecho, se fue esta semana, a días de la definición-, muchos reemplazos, cambios en el jurado, y el ingreso de más parejas que las 20 iniciales. Esta combinación marcó la tónica del programa, más mediático que nunca.

En eso tuvo que ver el conductor, Ángel de Brito, que siempre buscó que participantes y jurados se enfrentaran en el programa, recordando viejas peleas y rencores añejos. Pero también el perfil de famosos que se buscó: caras conocidas, varios desconocidos e influencers con personalidades fuertes.

Si el cometido era generar conversación, el resultado fue exitoso.

Hasta los jurados se enfrentaron y discutieron como si se olvidaran de que están en un programa de televisión. Entre los conflictos más sonados están el de Oscar Mediavilla con Alex Caniggia; Nacha Guevara con Lola Latorre; Esmeralda Mitre con Karina, La Princesita; y entre los propios jurados: Mediavilla con Karina; Moria con Nacha y así. Para todos los gustos.

En las últimas semanas, Ángela Leiva y Rocío Quiroz tuvieron los mejores puntajes en cada ronda y llegaron a semifinales. Y si bien se podría pensar que Sierra, tiene pocas chances de ser el campeón, basta recordar que Fabián “La Mole” Moli, con menos dotes para el canto “Cachete”, ganó el Cantando en 2012 para confirmar que estos programas, más que premiar el talento, reconocen la popularidad.