Redacción El País
Un día después de que la entrada de Lisandro "Licha" Navarro terminara con tres nominados, Gran Hermano Argentina vivió una noche de emociones fuertes pero positivas, al disputarse una moto entre los concursantes originales de la casa.
Este martes, todos los jugadores que ingresaron al reality show en los primeros dos días, más Virginia Demo que se sumó un mes después como reemplazo de Carla "Chula" De Stefano, que abandonó voluntariamente, iban a competir por una moto.
Los llamados "originals" habían decidido que del desafío no iban a participar los nuevos, es decir, los cinco jugadores que ingresaron hace algunas semanas ni los dos que habían sido eliminados y volvieron a entrar, Joel Ojeda y Catalina Gorostidi.
Pero como la producción de este año tiende a lo impredecible, esa decisión fue modificada a último momento cuando sonó el teléfono rojo. Lo atendió Martín Ku y debió elegir a uno de los "repechados" o los nuevos para sumarse a la competencia por la moto, y optó por Cata.
El ganador de la moto se definió como había ocurrido con los premios anteriores: cada jugador debía pasar al frente, tomar una llave de un panel y probarla en el birrodado. Solo la correcta iba a lograr encenderlo.
Tras varias vueltas sin suerte, Santiago del Moro fue cambiando la estrategia y así, justo cuando el programa terminaba y de manera agónica, Federico "Manzana" Farías, el cantante de RKT que es uno de los más conocidos de esta temporada del reality, se convirtió en el ganador del premio.
La moto es una lujosa Benelli Imperiale 400, un modelo vintage que hoy cuesta en el mercado unos 7.490.000 pesos argentinos, alrededor de 9.000 dólares.