Redacción El País
Minutos antes de la medianoche terminó una nueva temporada de La Voz Uruguay, y Marcos Agüero se coronó campeón en nombre del equipo de Agustín Casanova, que por primera vez se llevó el trofeo para su equipo. El joven de 25 años, montevideano y con una notable voz, consiguió la mayoría de los votos del público y se llevó el trofeo y un premio de 500.000 pesos.

Artista con una fuerte fe cristiana, el año pasado le cantó al Papa en un evento de jóvenes y frente a un público de dos millones de personas, y en el inicio de este recorrido contó que llegó al concurso impulsado por El Gordo Verde. Hoy logró superar a Michelle Viquez, Anabel Llarena y Juan Amato.

A las 21.21 se puso en marcha la gran final de La Voz, con Ruben Rada amagando con iniciar una audición a ciegas y el resto de sus compañeros dando vuelta uno a uno sus sillas para integrarse al show. Rada, Agustín Casanova, Luana Persíncula y Valeria Lynch cantaron "Muere con la sonrisa" de la banda La Trampa para una apertura a la altura de la ocasión.

El público los aplaudió de pie y entonces Noelia Etcheverry presentó el último programa de la temporada, en el que, como es costumbre, los coaches cantaron con sus finalistas antes de que los competidores hicieran una última actuación individual.

El primero fue Rada con Juan Amato, de La Teja, trabajador en un taller de confección y también cantante en la banda Monterrojo. Hicieron "11 y 6" de Fito Páez, pero en la versión candombera (y con tambores en el escenario) que el propio Rada grabó con el rosarino. Para rematar una gran presentación, apareció Fito en video y dijo que en la música "no se compite, la música es para compartir".

Siguió Luana con Michelle Viquez, con una versión de "Que digan lo que quieran" de Natalia Oreiro (la exconductora de La Voz) que la propia Luana ya tiene incorporada en su repertorio. Dieron un show poderoso y ya prometieron repetirlo en alguna oportunidad en vivo. "¡De gira juntas!", anticipó la coach debutante.

Oreiro hizo un regreso inesperado a través de un video con el que saludó tanto a la coach, que quedó eufórica, como a la finalista. "Luana, de quien soy recontrafan, tiene una tremenda artista con alma rockera", dijo la actriz rioplatense. "Está más emocionada la coach que ella", reconoció Noelia Etcheverry entre risas.

El tercer coach en subir al escenario fue Agustín Casanova, acompañado de Marcos Agüero, el joven de 25 años que ya le cantó al Papa. Fue con "Oración de remanso", una canción de Jorge Fandermole ampliamente versionada por voces como Liliana Herrero, Laura Canoura o Nahuel Pennisi (el que apareció en la pantalla para saludar al equipo), entre tantas otras, y que es la favorita personal de Casanova quien, dijo Etcheverry, intentó cantarla en todas las temporadas. Fue una bellísima interpretación de un dúo que se mostró sólido.

Cerraron la ronda Valeria Lynch con la cubana Anabel Llarena y "Arrancacorazones", una canción de Attaque 77, la banda de Mariano Martínez, pareja de la argentina, que apareció con un mensaje para decirle a Anabel que su voz llega "profundo" y "adentro". Hicieron el tema bien rockero, pero imprimiéndole un estilo propio.

Foto: Captura de Canal 10

Una hora después, inauguró la segunda vuelta Juan Amato cantando una impecable versión de "Déjame llorar" de Ricardo Montaner, que le valió una ovación de pie. Terminó sin palabras. "Juancito, después de esto sabés que tenemos que ganar, ¿no?", le dijo Rada y le dedicó las más conmovedoras palabras, valorando su humildad y gratitud. "Para mí sos el cantante más divino que estuvo en mi team, realmente", cerró el coach, que le dijo que desea que puedan hacer cosas juntos. Juan rompió en lágrimas.

Le siguió Michelle Viquez, que arrasó con el escenario con su interpretación de "Show Must Go On" de Queen que dejó a todo el estudio sin aliento. "Sos talentosa y sos brillante", le dijo Luana, visiblemente impactada, mientras todos en el estudio coreaban el nombre de la cantante de apenas 20 años y que toda su vida soñó con dedicarse a la música. Como Juan, la artista terminó llorando y con la voz quebrada mientras decía: "No quiero hacer otra cosa que no sea esto".

Michelle le dedicó unas palabras tan sentidas a Luana que la coach se levantó de su silla y fue a abrazarla al tiempo que le decía al oído: "Sos enorme".

Más adelante vino Marcos Agüero, a quien Noelia Etcheverry presentó como "el galán del grupo". Le dedicó la final a Dios y luego subió al escenario con "Porque aún te amo" de Luciano Pereyra, en una virtuosa actuación aunque con un pequeño error que él mismo señaló. "Es una excelente persona y yo creo que un artista es un artista cuando es arriba del escenario, pero también abajo", le valoró Casanova. "No tengo ninguna duda de que te va a ir bien en la vida, no solo en el canto".

El final fue de ensueño con Anabel Llarena cantando "Sola otra vez", la versión en español de "All By Myself", un clásico del repertorio de Céline Dion que implicó una nota tan exigida que llevó a Agustín Casanova a treparse a su silla y quedar de boca abierta durante muchos segundos. Fue una actuación sublime. "Te juro que me tiembla todo porque superaste todas las expectativas que tenía", le dijo su coach Valeria Lynch.

"Estar en este programa para mí es el puente para reunirme con mi familia, con mi hijo", dijo la joven migrante que vino buscando una mejor oportunidad económica y dejó en la isla a su niño de dos años.

Antes de terminar, los coaches le dieron cálidos mensajes a sus finalistas.

A diferencia de temporadas anteriores, esta vez no se mostraron los porcentajes de cada finalista y directamente se anunció al ganador, ya que todo el programa fue grabado previamente. Se hicieron cuatro finales alternativos y se emitió el que se correspondió con el voto de la audiencia, que sí se estuvo monitoreando hasta el último minuto de hoy.