REPASO
La pastelera Irene Delponte llegó al programa de Canal 10, en una jornada que dejó una confusión entre un pomelo y una naranja, y una nueva eliminada.
El dulce y la pastelería se apoderaron este martes de las cocinas de Masterchef Celebrity Uruguay. La presencia de Irene Delponte en sustitución del ausente Laurent Lainé hizo la diferencia en una jornada protagonizada por Peppa Pig y los alfajores con (mucho) dulce de leche.
En la prueba de beneficios, el equipo verde se dividió en duplas para replicar una torta infantil con una de las decoraciones de moda de los últimos años. Sergio Puglia y Ximena Torres sembraron el pánico cuando le dijeron a los participantes que iban a tener que trabajar con cerdo, pero al final solo se trataba de un personaje. A la mayoría, el anuncio le trajo alivio.
Chris Namus, que había tenido el mejor plato del último programa (aquel stromboli relleno de mortadela que arrancó un "¡Aleluya!" de Puglia), fue la encargada de armar las parejas. Se quedó con Natalie Yoffe, una de las más flojas del plantel; juntas hicieron una tarea accidentada pero digna.
El desempeño en general fue bueno, pero el dúo de Eunice Castro y Sara Perrone se destacó sobre el resto y consiguió así la inmunidad y, por ende, el pasaje directo al balcón. Sin embargo, Perrone, que ya había gozado del beneficio, sorprendió a todos cuando dijo que quería cocinar, y que prefería cederle su lugar en las alturas a otro compañero. El jurado le concedió el deseo y la comunicadora eligió a Santiago Comba quien, junto a Clipper, había logrado la otra mejor actuación del desafío.
"No hay escribano, pero vos me debés una", le advirtió Sarita, y Comba le ofreció ser su personal trainer. Eunice no quiso saber nada de compartir y subió rápido las escaleras, para ver el resto del programa desde arriba.
Para el siguiente tramo, Delponte —que además de pastelera es comunicadora y autora del libro La cocina de Sante— dio una clase magistral sobre alfajores, su especialidad. Todos tomaron nota y la aplicaron en una prueba de eliminación para la que tuvieron 60 minutos.
Chris Namús, que padece celiaquía, otra vez tuvo que trabajar de tapabocas para evitar la posible ingesta de partículas de harina. Yoffe dio la nota, esta vez al confundir un pomelo con una naranja, y Martín Kesman se mostró bastante molesto con aquellos compañeros que no cerraban la heladera y no dejaban enfriar el chocolate. Inconvenientes hubo varios.
Kesman fue el primero en pasar al frente con sus alfajores, que recibieron elogios de la invitada, "especialmente el de chocolate blanco". Se veían muy bien y el resultado, dijeron los expertos culinarios, estuvo en línea con su forma ordenada de trabajar.
María Mendive había terminado la prueba muy contrariada y disgustada con lo hecho. Su logro, dijo, era haber entregado, y Delponte se lo reconoció. "La masa, a pesar de todos los contratiempos, quedó bien y era rica", le comentó Puglia, y añadió: "Tu mesada era un caos. Ese caos se ve reflejado en el producto". Torres le criticó la prolijidad.
Carlos Malo estaba muy confiado y orgulloso de haber usado ingredientes como la mantequilla de maní o la mermelada de naranja, y no se equivocó. "Me da verdaderamente mucha pena haber tenido que cortar esos alfajores y que se desarmen, porque estaban tan ricos que seguiría comiéndolos", celebró Delponte, que lo felicitó por lo que entendió como un "homenaje" al mundo del alfajor. Torres le habló de la modernidad y de la sofisticación, que no es poco. Para rematar, Puglia confesó: "Me sorprendiste". Eunice le pidió la receta y la audiencia, está claro, se quedó con ganas de probar.
La mirada generalizada que el jurado le devolvió a Natalie Yoffe tras la degustación fue, hay que decirlo, alarmante. Sin embargo, una inesperada combinación de pomelo y banana —y dulce de leche— recibió comentarios elogiosos. El de ticholo, que fue el otro alfajor que preparó, pasó "sin pena ni gloria", dijo Puglia. "Es un buen debut", agregó Torres; la modelo y emprendedora nunca había hecho este dulce.
Clipper, confesa fanática de los alfajores, tuvo tiempo de acompañar su plato de bocaditos dulces y eso, a la pastelera invitada, la dejó "muy feliz". Hizo un trabajo correcto, pero el manejo de la pasta de avellana y el agregado de la memoria emocional le dieron un valor agregado. La rapera terminó entre lágrimas, porque pasó al frente convencida de que había fallado. "Te llevo ya a trabajar conmigo", añadió Torres, entusiasmada por la forma en la que trabajó.
Le siguió Danna Liberman, que no escatimó en el uso del dulce de leche. Le valoraron la sucre de cacao, el toque de sal utilizado, la combinación de chocolate blanco y pomelo y la mezcla de frutos rojos con dulce de leche, que Puglia calificó de novedosa y arriesgada. "Venís dándonos ese no sé qué en tus preparaciones que va encantando", la elogió Torres. "Pasa de ser un producto que se vende en un kiosco a un producto de restaurante".
Namús, que llegaba con la vara muy alta por su desempeño en el programa anterior, prefirió no irse a los extremos y trabajar sobre lo clásico. "Te felicito. Es perfecto", le comentó Torres respecto a un alfajor triple que fue definido como "de campeona", sin mucha metáfora.
Para el final quedó Sara Perrone, quien se había arriesgado y había elegido cocinar a pesar de haber ganado el beneficio de la inmunidad. Delponte le señaló varios aciertos: la combinación de chocolate y naranja en uno, la elección de un molde cuadrado en el otro, y el sabor cítrico de un prolijo glaseado. La decisión del comienzo le salió bien a la ex Consentidas.
"Por creatividad, disciplina y por honrar a esta maravilla que tenemos en el Río de la Plata", dijo Delponte, el mejor plato de la prueba fue el de Carlos Malo, el cantor rochense que hasta ahora se ha lucido en el reality.
Siguieron sus pasos Perrone y Liberman, a quienes Puglia les puso fichas como potenciales finalistas del equipo verde. Luego avanzaron Kesman y Clipper, y para el final quedaron las tres con preparaciones menos logradas: Mendive, Yoffe y Namús. Y casi que sin preámbulos, el chef anunció que la nueva eliminada del equipo verde era María Mendive.
"Celebro el aprendizaje. Estoy muy emocionada", dijo la actriz, que se fue ovacionada por sus compañeros.