ENTREVISTA

"Me encanta mi trabajo y lo llevo en la sangre. Y cuando lo sentís, no te para nada ni nadie”, le comenta el periodista Celso Cuadro a El País. Y el corresponsal de Telemundo desde hace 22 años sabe bien de lo que habla. En estas dos décadas ha cubierto incendios, temporales, accidentes y crímenes, pero no pierde la motivación. Es más, la semana pasada fue parte de una discusión con un guardavidas de Maldonado que lo intentó “apretar” y que se volvió viral, pero asegura que eso no afecta su trabajo. “Fue una discusión más de las que tenemos todos los días. El tema es que lo filmaron y trascendió”, comenta.

A continuación, Celso repasa, en primera persona, cinco anécdotas de sus años como corresponsal de Telemundo.

“En una mañana de 2011 me llamó un mozo del restaurante La Huella para decirme que Richard Gere iba a comer ahí. ‘¿Estás seguro?’, le dije con sorpresa porque fue un llamado increíble y no tenía el teléfono identificado. “Sí, pero no te puedo decir más nada”, me respondió. Nos plantamos ahí a las 10.00, pero pasaban las horas y Richard no aparecía por ningún lado. Pensé que el mozo me había mentido, así que me fui por la costa y en determinado momento lo veo. Le tiro un par de viajes en un español e inglés medio indio del ‘tú, yo, ser’ y me dijo que era un placer estar ahí. Fue una exclusiva nuestra porque andaba todo el mundo atrás, pero nadie sabía dónde estaba. Cuando se subió al auto me tocó la cara y me saludó con amabilidad. Linda experiencia”.

“En 2016 entrevisté a Mike Tyson en el Conrad, pero yo no entendía nada de lo que me decía y él no entendía lo que le preguntaba. Hay una foto muy graciosa en la que nos reímos los dos porque nadie sabía qué hacer (se ríe). Entonces le dije: “Speak”, matándome de la risa mientras lo filmaba. Lo edité, lo mandé al canal y cuando terminan me dicen: ‘¿Viste lo que te dijo? Habló maravillas de Uruguay’. Al final, la nota salió bárbara”.

“La primera vez que fui a cubrir algo grande en Maldonado fue a finales de febrero de 2009, cuando se incendió un crucero que traía a unas 2000 personas a bordo. Fue un escándalo tremendo y como los equipos de verano del Canal 12 ya se habían vuelto, me tocó ir. Nos embarcamos en un yate que el canal alquiló para estar cerca del crucero y fue tremendo porque las calderas estuvieron a punto de explotar. El barco se había quedado casi que a la deriva porque todo el sistema era eléctrico y tampoco bajan los botes. Me agarré un mareo bárbaro, pero tenía la información e hicimos el móvil con un equipo satelital junto a Alejandro Figueredo.

Pero la jornada no terminó ahí. Desde el canal me dijeron que me tenía que quedar porque iban a empezar a desembarcar a la gente y a las valijas, pero como los del crucero ponían mucho dinero en Punta del Este pusieron un vallado para que no se filmara el desembarco. No sé cómo, pero el canal arregló para que nos subiéramos a uno de los primeros barcos que iban hacia el crucero para traer las valijas. Nos fuimos camuflados con las cámaras, pero se armó tremendo lío cuando le tiraron una valija al camarógrafo y él se paró diciendo que no aguantaba más. Nos vio un oficial del barco y se armó tremendo lío. Mientras volvíamos al puerto, los colegas nos filmaban como si fuéramos los primeros tripulantes en llegar (se ríe). Nos complicaron en la prefectura porque no estábamos autorizados, pero se arregló”.

 “En 2019 fui al balneario La Esmeralda para cubrir un incendio. Me quedé hasta la noche porque es cuando la imagen se ve mejor, pero como el camarógrafo ya se había ido me tocó hacer cámara. Se veía que el incendio iba a consumir varias casas de la zona, pero me tenía que quedar para mostrar la imagen. Estaba junto a un corresponsal del Canal 4 y en la madrugada vimos una cosa tremenda: unas llamas gigantescas de 15 metros que quemaba todo. Nos encerró el fuego y pasó una cosa rarísima que, por suerte hoy podemos contar: estábamos concentradísimos en grabar el fuego y de repente, en medio de las llamas y el humo, aparece un hombre un tipo en bicicleta. Fue una cosa brutal y dejamos todo para ayudarlo. Estaba en shock porque se le había quemado la casa y lo resguardamos a tiempo mientras avanzaban las llamas.

Cuando llegaron los bomberos hicieron un túnel de salida y pudimos irnos, pero se quemaron 10 casas. Fue la primera vez que tuve que usar atiparras y mascarillas, y eso me salvó la vida porque la inhalación del humo era brutal. Fue muy complicado, ahí casi.. (hace una pausa), por suerte aparecieron los bomberos en el momento justo y zafamos. Fue algo muy difícil”.

"El día de Halloween era domingo y yo me tenía que ir de La Paloma a Maldonado. Almorcé en mi casa con mi mujer y mis hijos, y ellos se fueron a pedir caramelos; en determinado momento me llega la foto de dos niños disfrazados de mí y de un camarógrafo del Canal 12. Mis hijos se los encontraron y le dijeron a mi mujer:‘Mirá, alguien se disfrazó de papá’ (se ríe). Hicimos una videollamada y conversé con ellos;no los conocía, pero fue una alegría tremenda. Hace unos días pude conocer a uno de los niños y me dijo que lo hizo para hacer algo diferente y porque siempre me ven en los móviles. Después les hicieron una entrevista y cuando les preguntaron por qué pensaron en el disfraz, respondieron:‘Nos queríamos disfrazar de alguien bueno y por eso elegimos a Celso’. Eso no te lo esperás y te pone la piel de gallina; es de las anécdotas más lindas que tengo”.