ESTRENO

nicolás lauber

La televisión uruguaya, que vive un auge de las adaptaciones locales de formatos internacionales ha estado en deuda con la ficción. Una deuda que, ojalá, se empieza a saldar este viernes a las 23.00 cuando Canal 10 estrene Temporario, un ciclo de unitarios filmados en la sala Campodónico de El Galpón.

Se trata de una idea original que la argentina Esther Feldman, —con una conocida carrera como guionista de ficciones como Okupas, Lalola y Los exitosos Pells— le propuso a la gente de El Galpón quienes, aprovechando la ausencia de espectáculos, decidieron llevarla a cabo.

Para concretarla, además, se convocó a Gabriel Calderón, Pablo Stoll, Laura Santullo, Rodolfo Santullo, Carlos Morelli, Federico Borgia y Marcos Acuña, para que construyan, desde los guiones y cada uno con su lenguaje e impronta, las historias que se desarrollan en un apartamento de alquiler, precisamente, temporario.

La dirección es de Guillermo Casanova, responsable de uno de los grandes éxitos del cine nacional (El viaje hacia el mar) y de una carrera de más de 35 años que comenzó con Mamá era punk e incluye películas como Otra historia de mundo, además de video clips, cortometrajes y documentales.

“Estaba todo cerrado, pero las ganas estaban y dijimos: ‘vamos a hacerlo’. Al principio no había fondos, y lo empezamos a pulmón. Después ganamos el Montevideo Audiovisual y el PUA (Programa Uruguay Audiovisual), dos premios importantes. De otra forma, esto no hubiese salido”, dijo Casanova a El País.

Con el proyecto en desarrollo, fueron a Canal 10 gracias al vínculo generado en los últimos años por las grabaciones del reality Got Talent. “Nos acercaron la idea a través de Jeannie Fontaina y nos pareció una muy linda oportunidad para volver a tener ficción en nuestra pantalla, de la mano de una institución con tanto prestigio en la cultura nacional, como es El Galpón”, dijo a El País, Iván Ibarra, gerente de programación de Canal 10.

Todos los episodios se realizan en un único lugar, ese apartamento temporario que le da título a la serie. Para lograrlo la arquitecta del teatro se convirtió en directora de arte y construyó el set donde se desarrollarán la distintas historias del ciclo. Todas con distinta impronta, elenco y trama. El primer episodio, escrito por Gabriel Calderón, aborda el tema de la eutanasia.

Al tratarse de capítulos independientes, y para mantener las distancias sanitarias se dividieron los elencos para hacerlos más autónomos. Una vez que el episodio estaba ensayado, se pasaba al set para ser filmado. Eso llevó tres días, a una sola cámara; y una vez finalizado se repetía el procedimiento con la siguiente historia. Así trabajaron durante las cinco semanas que llevó el rodaje, de mayo a setiembre de este año.

“Esto fue una experiencia de urgencia por la pandemia”, dijo Casanova a El País, quien entiende que un producto de estas características, lleva dos años en poder hacerse. Ellos lo hicieron en seis meses.

El director venía trabajando con el proyecto de streaming del teatro y entendió que, con trabajo, se podía generar una historia que fuese un producto con calidad cinematográfica para verse en televisión.

En los primeros ensayos, cuando los actores decían sus parlamentos miraban la platea en vez de a su compañero de elenco, o hacían pausas. “Eso fue cómico, y los actores también se reían de eso, como de decir los parlamentos sin moverse. Fue un aprendizaje para todos, porque es mentira que hay un actor de cine y otro de teatro. Hay actores buenos o malos, y acá fueron entendiendo este otro lenguaje y a trabajar con cosas que no conocían, como un primer plano o un plano americano”, agregó Casanova, quien diferenció a Temporario de productos similares, como el recordado ciclo argentino Alta Comedia que manejaba un plano teatral.

“Acá hay un proceso de trabajo de la escena y del plano, y el actor fue acompañando esa historia cinematográfica para desarrollarla en televisión”, dijo.

Eso se logró, porque desde la institución se quiso dejar en claro que son gente que no está acostumbrada a las cámaras.

“Fuimos fieles al lenguaje televisivo, pero en ningún momento quisimos ocultar que somos un teatro y desde nuestra experiencia hacemos este abordaje”, comentó Héctor Guido, quien integra el elenco de uno de los episodios.

Por eso, al cerrar cada capítulo se rompe la cuarta pared para descubrir que el escenario está en la Sala Campodónico.

“La idea es finalizar con esa cámara alejándose del escenario, ver las butacas y la fachada del teatro para mostrar esto es El Galpón”, dice Casanova.

“Parece poco creíble que lo hicimos durante la pandemia, pero era una forma de pasar tiempos difíciles”, comentó Guido, quien dijo que ya se está pensando en hacer una segunda temporada de este ciclo.