La Nación/GDA
Este lunes al término de La Voz Uruguay, Canal 10 estrenó Survivor: Expedición Robinson, el reality show de Telefe que cuenta con la conducción de Marley. Está formado por 25 participantes que compiten para llevarse un premio millonario.

Luego de cada emisión, que en Uruguay se podrá ver de martes a jueves a las 22.30, los episodios serán incluidos en el catálogo de Disney+, que también ofrecerá Mucho más Survivor: Expedición Robinson, una versión expandida de cada capítulo.

¿Quiénes son los nuevos jugadores que deberán enfrentar desafíos de supervivencia extrema, en un escenario tan paradisíaco como inhóspito en medio del Caribe colombiano?

Iván Chirinian (29) es “entrenador orgánico”, oriundo de Neuquén. Como suele zambullirse en el mar sin ropa, se ganó el apodo de Tarzán por parte de sus compañeros. "Me parece que es necesario que las partes nobles del hombre y de la mujer respiren porque es una zona muy húmeda. Es importante estar desnudos. Este ritual que hago es tirarme al agua, dejar que el sol me pegue en las zonas donde me tiene que pegar y que retire la humedad", dijo en el video de presentación del programa.

Juan Pablo Goldi (35), es cordobés y colectivero. En el clip, mientras juega con una araña, uno de sus compañeros dice: “Es un bocado para Goldi”. ”Lleven una mochila por si encuentran mangos”, le dice al resto de los jugadores, en los que parece ser más una orden que una sugerencia. “No quiero ser líder porque a esa persona le van a pedir decisiones, pero pueden salir mal”, asegura.

Aixa Legarreta (24) es de Santa Fe y trabaja como artista de circo. “Va a ser interesante ver a las personas cuando faltan sus comodidades. Eso puede sacar lo peor de uno o ser una linda experiencia, un aprendizaje”, indica frente a la nueva hazaña que acaba de emprender. Sobre las razones que la llevaron a participa del reality de supervivencia dice: “Me gusta manejar y desafiar mi cuerpo. Con el grupo cantamos y jugamos, creo que la distracción de la mente ayuda”.

Juan Pablo Busilachi (32) es un abogado y comerciante de Hurlingham. Sobre su nueva experiencia en la naturaleza desprovisto de todas las comodidades, el participante expresa cuales son sus mayores temores: “Con la comida la veo complicada, soy de comer mucho. Voy a tener que ganar la batalla de la cabeza”. Y agrega sobre el desafío: ”Podría estar en mi casa viendo tele. Mi mayor virtud es ser positivo, me gustaría transmitirle a la gente que también se puede vivir bien con menos”.

Julieta Clemente (24), es chubutense y estudiante de Derecho. Tiene su propio plan para ganar: “Quizás no se va a notar tanto mi estrategia, como que estoy dejando fluir y a la hora de la votación eso se va a notar un poco más”. Ya desde el comienzo demuestra que no recibe órdenes. “No me parece para nada”, responde a otro de los jugadores, dejando al descubierto que se mueve con paso firme. “Con la supervivencia me siento confiada, nunca se espera mucho de mí, y creo que en eso sorprendo para bien”, cierra mirando a la cámara.

Baltasar López Barraza (18) es el más chico de todos los participantes y vive en Pilar, Buenos Aires. “Me gusta que las cosas se hagan como yo quiero y eso puede ser chocante”, expresa. Mientras cocina en una cacerola sobre un fuego a leña para todo el grupo confiesa: “Mi mamá cuando vea esto no lo va poder creer.... Má, tranqui, voy a sobrevivir“, dice mientras sonríe a la cámara.

Malena Kerschen (27), es diseñadora de indumentaria y vive en Buenos aires. Ya está empezando a notar el hambre y la falta de comodidades en la isla: “Me preocupa que estemos perdiendo un beneficio con el hambre que tenemos”, expresa a sus compañeros. “El pelo es algo que me está estresando porque se me hacen rastas”.

Samanta Gerdt (27), es entrerriana y trabaja como modelo. “Siento que estoy superpreparada para los desafíos y tengo mucho para dar, tengo liderazgo también”, asegura confiada. Mientras, en el aislamiento da clases de gimnasia, y sus compañeros la siguen.

Eugenia Propedo (32), nació en Luján, Buenos Aires, es ingeniera química y sintetiza el motivo que la llevo a inscribirse en Expedición Robinson: “Me gustaría vivir de una manera más relajada así que renuncié a todo para meterme de lleno en este momento”. Y sobre el desafío, afirma: “Soy extremadamente competitiva, no me gusta perder a nada, así que voy a ganar”.

Fiorela Fraccaro (32) es personal trainner, vegana y es de la ciudad de Bragado, en la provincia de Buenos Aires. “No le esquivo a los desafíos, me gusta jugar, me gusta competir”, cuenta. Y añade: “Amor y paz ya no hay más. Al enemigo ni justicia. (...) Considero que soy una candidata a ganar”, dice firme.

Martina Musillo (19), estudia periodismo deportivo y es de Santa Fe. “No me va la gente que va por atrás, los voy a bajar. Cuando me enojo soy lo peor que les puede pasar”, advierte. Y luego se describe como “botinera” y, como una influencer de la naturaleza, muestra cómo hacer una mascarilla de caracol para rostro.

Martín “Colli” Collante (35), es empleado de una farmacia en Villa Crespo, en la capital de Argentina. “No encuentro en el otro un enemigo, una pelea o una competencia”, expresa que quiere pasarla bien: “Hay que trabajar para no perder al niño interno; hace un rato que estoy peleando conmigo mismo”.

Tomás Piñero (28), piloto privado, es del partido de 9 de Julio, en la provincia de Buenos Aires. “Me banco que llueva, me banco dormir en el piso, pasar frío, me banco pasar calor...”, revela.“Tengo un carácter medianamente fuerte, soy bastante tranquilo hasta que se me salta la chaveta”, describe sobre su personalidad y resalta: “A los otros participantes les diría que se van a encontrar con una persona muy competitiva”.

Gabriel “Torito” Velázquez (25), es un paratleta de San Francisco Solano, provincia de Buenos Aires. “Tengo una discapacidad, una parálisis de medio cuerpo y lo que quiero demostrar es que se puede lograr y obtener el objetivo que uno quiere”, se presenta. “Siempre me esfuerzo para dar lo mejor de mí”, dice el deportista. Sobre su mayor temor durante el aislamiento en la naturaleza es el hambre: ”Soy de comer mucho y lo necesito”.

Maru Corona (32) es docente en Santa Fe. “Mentalmente estoy preparada para esto, y eso me hace estar a la altura de cualquiera de mis compañeros”, expresa sobre el desafío. ”Cada mañana, cuando me despierto, digo ‘¿Qué estoy haciendo acá en el medio de la nada?’”. Y agrega: “La gente en sus casas debe pensar que esto esta armado, pero es real: no hay comida, el agua es escasa y estamos todo el tiempo mojados. Es muy complicado”.

Janet Duarte (28), se presenta como “modelo, bailarina y actriz de La Boca”. ”Me gusta crear conflictos entre personas. Me gusta liderar y voy a hacer lo posible para ser líder acá”, asegura frente a cámara. Y sobre como maneja la escasez en medio de la aventura, afirma: ”Me entretiene cazar y trato de tener comida siempre”.

Agustín Pérez Bardeci (35), es licenciado en administración de empresas y agente Inmobiliario, vive en Capital. “Creo que voy a desarrollar nuevas habilidades; sé que las tengo, pero al estar en la ciudad hay que despertarlas”, reflexiona. Y sueña con ganar: “Me encantaría ser el último y llevar esta choza a la Argentina y poder disfrutarla allá”.

Francisco Pardo (34), es de Palermo, trabaja en una compañía de inversión como CEO: “Voy a ganar; quiero ganar. Me encanta competir. Quiero demostrarme a mí mismo que soy capaz de afrontar desafíos físicos y mentales, y que tengo la capacidad estratégica para ganar este juego”. Y abre otro juego diferente a la supervivencia: “No se si se podrá encontrar el amor acá. Todo es extremo, es difícil y no sabés lo que sentís. Simplemente se vive el día a día“.

Inés Lucero (30), es una estudiante de Tierra del Fuego. “Puedo llegar a ser lider o estar por mi propia cuenta. Mi personalidad siempre se termina notando. O estás al lado mío o atrás, nunca adelante”, puntualiza. “Hay mucho ego, mucho narcisismo, mucha personalidad inflada”, resalta sobre el resto de los expedicionistas que compiten en el programa.

Malvina Ramírez (51) es de un pequeño pueblo del este de Mendoza, y trabaja como directora en una escuela rural. “Nunca había pasado por esta situación de no tener qué comer. Pasar hambre por una dieta no es lo mismo que pasar hambre por necesidad. Me relajé y puse la atención en otra cosa”, resalta. “Si nos organizamos somos fuertes; y si nos organizamos y tranquilizamos, somos más fuertes; y si nos organizamos, nos tranquilizamos y nos concentramos, somos imbatibles”, resume sobre su mantra para su día a día en medio de la infinidad de la naturaleza.

Martín Lobo (53) fue miembro del cuerpo de bomberos de la capital argentina durante 20 años; hoy está retirado y vive en Caballito. Le enseña al resto del grupo la unión hacia la fuerza. “La idea es pasarla bien y ganar una nueva experiencia en mi vida”, explica.

Giselle Margonari (42) vive en Núñez y trabaja de croupier en un casino. “Es lo mas arriesgado que voy a hacer. Soy una chica muy de ciudad”, reconoce la participante y añade: ”El grupo es hermoso, no se a quien voy a votar porque son todos buena onda. Soy positiva y creativa, me encanta el trabajo en equipo”.

Agustín Monzón (22), es santafesino y por ahora es el participante más conocido. Es nieto del recordado Carlos Monzón. Actor y doble de riesgo, debutó con un rol en la serie sobre la vida del boxeador. “Me anoté para demostrar realmente quien soy. La posibilidad de participar de algo así me volaba la cabeza. (...) Soy auténtico. No me gusta ir por atrás y hablar mal de los demás”, avisa.

Braian Zárate (28), es de Villa Fiorito, trabaja en gastronomía. Es padre de Oliver, de un año y ocho meses. “Mi sueño es poder sacar a mi hijo del barrio y tener mi casa propia”, dice frente a las cámaras. Braian apela a la empatía del público: “Yo no estoy acá por la fama, vine para darle una mejor vida a él. Lo extraño un montón, estoy acá por él”.

Mauro Guarnieri (43), es empleado administrativo y vive en Buenos Aires: “Lo importante es tener un buen juego social con la gente porque son ellos los que te eliminan”, advierte que su plan es ganar y tiene explica desarrollada su propia estrategia en la teoría: “A mi no me importan para nada los juegos, no los disfruto, no me divierten. Lo que me divierte es ir consejo, maquinar por atrás. Ir eliminando a la gente que sabes que te puede llegar a la final y llegar a la final con los que sabes que les podes ganar”.