ENTREVISTA
"Tanto Blanca como yo somos dos personas discretas en nuestras carreras", le explica la chef a El País luego de los rumores en torno a sus columnas de Subrayado.
"Cada día me levanto con ganas de hacer más”, dice, desde el otro lado de la línea telefónica, Ximena Torres. Y, mientras la chef le cuenta a El País todas las actividades que tiene agendadas para lo que falta del año, a uno no le queda más que creerle. Además de su rol como jurado en la segunda temporada de Masterchef Celebrity —que va los martes por Canal 10— y de su segmento gastronómico en Subrayado, Torres tiene varios proyectos en mente.
En menos de dos semanas inaugurará una nueva sucursal de La Dulcería en Carrasco y a finales de en noviembre viajará a París para participar de la nueva edición del Premio Gourmand, dedicado a libros de cocina y vino de todo el mundo. Este año, Torres recibió dos nominaciones por Casero es mejor (Aguaclara): chef mujer y mejor libro de cocina para la familia. “Espero traerme algún premio”, dice con la misma alegría que cuando prueba un plato que la sorprende en Masterchef.
Sin embargo, aclara: “Vivo pensando que no llegué a ningún lado, sino que es el camino el que cuenta”. Y, sobre su recorrido en los medios y el crecimiento de los formatos culinarios en televisión, Torres habló con El País.
—Desde que llegó Masterchef a la televisión uruguaya, los programas de cocina han crecido bastante en la televisión local. Incluso los tres canales privados tienen un reality show de cocina en horario central. ¿Cómo analizás el terreno ganado?
—Me da mucho orgullo porque hoy lo más común es prender la tele y que haya cocina. Sin embargo, todavía me acuerdo que cuando empecé en los medios, hace 10 años, le planteé a un gerente que quería tener un programa de cocina en la noche, y él giró los ojos como diciendo: “¿Estás bromeando?”. Ahora, sin ir más lejos, Subrayado me ha venido a buscar para hacer una columna los jueves. Y también me fascina que haya tantos realities de cocina en Uruguay; yo participo en uno pero consumo el resto. Siento que a la gente le interesa la cocina y que quiere aprender porque es algo que les hace felices. Además, eso te va a dar más herramientas para cocinar o incluso para ser crítico con el chef; todo esto eleva la cultura gastronómica del país. Hace 10 años, nadie te devolvía un café quemado, hoy te lo mandan para atrás.
—La cocina también ocupa lugares importantes en las radios y en las novedades editoriales. ¿A qué le adjudicarías ese creciente interés?
—Es algo que está pasando en el mundo entero: cocinar en casa se volvió a poner de moda. Siento que se debe a la visualización en torno a los alimentos y que ya dejamos de sentir sabores. La gente se aburrió de comprar un chocolate que en realidad es un símil de chocolate. Se estropeó tanto que tuvimos que volver a lo básico, y eso significa hacer un plato con cinco ingredientes. En este tiempo volvimos a lo casero porque nos dimos cuenta de que podemos comer más rico y vivir más sanos. Es un cambio que atraviesa el mundo y en Uruguay nos permite descubrir que hay algo más que solo comer papa y carne.
—Eso es lo valioso de Masterchef. Más allá del entretenimiento, hay un aprendizaje en torno a la variedad culinaria y a perder el miedo a cocinar nuevos platos. ¿Estás de acuerdo?
—Sí, y creo que el paladar uruguayo tiene un potencial de desarrollo tremendo; es más, siento que no hemos llegado a la mitad de lo que podríamos llegar en cuanto a la delicadeza y a la elección de productos. Pero todos somos agentes de cambio y tanto Sergio (Puglia), Laurent (Lainé) y yo somos unos apasionados de lo que hacemos, y siento que ese es el legado que le podemos dejar al televidente.
—A más de un mes del estreno de Masterchef Celebrity 2, ¿cómo valorás el nivel de los participantes?
—La verdad que nos viene sorprendiendo a todos por la capacidad histriónica y el talento en cada una de las áreas donde los chicos participan. Además, gastronómicamente hablando, viene siendo el mejor año. Son participantes competitivos y supercompañeros. Se nota que todos quieren ganar y que quieren aprender porque cada semana tratan de venir con algo nuevo para deslumbrarnos.
—A finales de julio iniciaste una columna de la cultura gastronómica en Subrayado. ¿Cómo surgió?
—Recibí la invitación de parte del canal y abracé la propuesta porque me pareció una buena apuesta. La gastronomía también es cultura y se merece un lugar dentro del noticiero. Lo agradezco y lo aplaudo porque todo lo que tenga que ver con la cultura nos hace trascender como seres humanos.
—La primera columna salió en vivo, pero el resto se grabaron. Se dijo que se debía a una rispidez con Blanca Rodríguez. ¿Es verdad?
—No, son todos rumores. La realidad es que las columnas estaban grabadas porque los jueves filmábamos Masterchef; no es más que eso. Pero bueno, yo lo dejo correr porque tanto Blanca como yo somos dos personas discretas en nuestras carreras y hemos llegado a nuestros lugares trabajando y no formando parte del chimento. Es más, en mi primer día en Subrayado le regalé unos macarons y me dijo que les habían gustado mucho. De cualquier manera, quédense tranquilos que esta noche salgo en vivo (risas).