GIGANTES TECNOlÓGICOS
Se prevé que la pionera legislación servirá como referencia a otros países para impulsar medidas similares.
Facebook y Google tendrán que pagar a los medios australianos para utilizar sus contenidos. Así quedó establecido en la nueva legislación aprobada este jueves. El caso australiano era seguido con atención por otros países que estudian ir por el mismo camino.
La ley se aprobó después de que Facebook y Google llegaran a acuerdos con el gobierno australiano para evitar verse sometidos a arbitrajes vinculantes.
La nueva legislación despeja el camino para que estas dos empresas inviertan decenas de millones de dólares en acuerdos de contenido con los medios australianos.
El gobierno de Australia declaró que la ley garantizará que los medios de comunicación “reciban una remuneración justa por el contenido que generan, contribuyendo así a mantener el periodismo de interés público en Australia”.
Google, por su parte, ya había aceptado pagar “sumas importantes” a cambio del contenido del grupo de prensa de Rupert Murdoch, News Corp., favorable a la nueva ley.
Facebook, en cambio, se enfrentó en un principio a las autoridades australianas y bloqueó durante unos días la publicación de enlaces a noticias de medios locales o internacionales. Este miércoles anunció que levantaría el bloqueo gracias a un acuerdo de último momento.
Google pagará por las noticias que aparecen en su nueva herramienta Google News Showcase y Facebook remunerará a los proveedores que aparezcan en su producto News, que lanzará en Australia este año.
¿Un precedente?
El mundo entero sigue muy de cerca el caso australiano. Si Google y Facebook parecen haber llegado a una solución en ese país, esto no significa el final de sus problemas.
La Unión Europea, Canadá y otros países esperan también regular el sector.
“No hay ninguna duda de que Australia lleva adelante una batalla para el conjunto del planeta”, afirmó esta semana el ministro de Finanzas australiano, Josh Frydenberg.
Si bien la nueva legislación de Australia obliga a las grandes empresas tecnológicas a negociar con los medios periodísticos una contraprestación por las noticias que se publican en sus plataformas, podrán seleccionar a sus proveedores de información y no están obligadas a suscribir un acuerdo forzado si ya han firmado convenios previos.
Este fue uno de los puntos que se cambió del proyecto original. Los gigantes del sector digital no querían que las negociaciones con los medios en Australia fueran obligatorias y que en caso de conflicto se pronunciase un árbitro independiente. Temían un precedente que amenace su modelo de negocio.
La ley de pagos por contenidos periodísticos fue elaborada a raíz de las investigaciones de la Comisión Australiana de Competencia y Consumo (ACCC), sobre el desequilibrio en los ingresos publicitarios entre las tecnológicas y los medios publicitarios en Australia..
Según el organismo australiano de la competencia, Google capta el 53% de la publicidad en el país y Facebook el 28%, mientras que el resto se lo reparten otros actores del mercado, como los grupos de prensa, insuficiente para financiar el periodismo de calidad.
El año pasado, el presidente del grupo mediático australiano Nine, Peter Costello, dijo que Google y Facebook generan unos ingresos publicitarios de unos 3.859 millones de dólares y aproximadamente el 10% de esa cifra es el resultado del contenido de las noticias.
Con la nueva legislación, “se trata de nivelar el terreno de juego. Se trata de que se vea protegido el interés público en el periodismo. Se trata de ver recompensado al periodista por generar contenidos”, explicó Frydenberg en una entrevista en el canal Sky News.
Inversiones y fondos de ayudas a los medios
Facebook y Google se han comprometido a invertir 1.000 millones de dólares cada uno en medios de comunicación, mientras que Australia y ahora la Unión Europea avanzan para forzar a las grandes tecnológicas a pagar por las noticias que se publican en sus plataformas y que generan tráfico.
Facebook se sumó este miércoles a Google y anunció, sin dar detalles, que en los próximos tres años invertirá 1.000 millones de dólares en “la industria de las noticias”, mientras que adelantó que está en conversaciones para apoyar con fondos a medios de comunicación franceses y alemanes.
Google anunció en octubre que invertirá 1.000 millones de dólares para “crear y seleccionar contenido de alta calidad para una experiencia con noticias online diferente”.
En sus anuncios, Facebook recordó que ha invertido 600 millones de dólares en ayudas y acuerdos con medios desde 2018, mientras que Google se refirió a los 300 millones de dólares destinados a su programa Google News Initiative.
Ambos también recordaron que dirigen una gran cantidad de tráfico de internet a las web de los medios de comunicación gracias a sus plataformas sociales y, en el caso de Google, a su buscador y su rediseñada página de Google News.
Estos compromisos tienen como trasfondo la ley que Australia acaba de aprobar y en la que se incluye un código de conducta que obliga a las grandes tecnológicas a cerrar acuerdos de pago por el uso de contenido original de medios de comunicación, tras un acuerdo con Facebook que llevó a modificar el proyecto.
La situación en otros países.
Los acuerdos de remuneración alcanzados por Google y Facebook con los medios australianos podrían convertirse en un referente para los países que tratan de seguir el mismo camino e, incluso, de reforzar la regulación de los GAFA, como es el caso de la Unión Europea.
Canadá. Ha manifestado su interés en seguir el ejemplo de Australia. El gobierno anunció el martes que ambos países “continuarán coordinando su trabajo con miras a frenar los perjuicios en línea y a garantizar que los ingresos de los gigantes de internet se repartan de forma más justa con los creadores y los medios”.
Unión Europea. Pionera en regulación de plataformas gracias a la RGPD (Reglamentación sobre la Protección de Datos Personales) y la directiva de 2019 que instauró los “derechos afines”, un derecho de autor que permite a los medios y agencias de prensa ser remunerados por el uso de sus contenidos en línea. Google, que se había opuesto firmemente a esta directiva, firmó en enero acuerdos de remuneración con varios medios en Francia, primer país en tratar de hacer aplicarla.
Estados Unidos. El debate sobre la regulación de los GAFA se concentra por ahora en la “sección 230” de la ley de Decencia de las Comunicaciones, que exonera a las plataformas y redes sociales de toda responsabilidad editorial. Joe Biden anunció en enero al New York Times su intención de eliminar esta disposición. Paralelamente, la idea de obligar a los GAFA a pagar a los medios empieza a ganar adeptos en el Congreso.
Reino Unido. El gobierno británico presentó en noviembre un proyecto de regulación de los GAFA, que incluye la creación de una “unidad de mercados digitales”, encargada de velar por la aplicación de un código de conducta para los gigantes de Internet. Esta unidad, que será creada en abril, está llamada a “reequilibrar” las relaciones entre los medios y estas empresas, supervisando acuerdos comerciales.
Nueva Zelanda. La NEME, principal grupo nacional de medios, anunció el miércoles su intención de abordar con los dirigentes políticos la cuestión de una posible remuneración de sus contenidos, afirmando que el gobierno “está en estos momentos reuniendo opiniones al respecto”.