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Una mascota divertida y muy sociable, que en muchas cosas se comporta como si fuera un perro y en otras como si fuera un gato. Un buen compañero para chicos y grandes, que se adapta con facilidad a los horarios de la familia, que no es para nada ruidoso, es limpio, pequeño e inteligente. El hurón es cada vez mas elegido como mascotaen todo el mundo y Uruguay no es la excepción.

Quienes los crían sostienen que existen varias ventajas para elegir a este pequeño animalito como un integrante más del hogar, pero destacan también que, como toda mascota, tenerla conlleva responsabilidad.

Desde Vip Mascotas, uno de los criaderos de hurones que está en Uruguay, se dijo a El País que los hurones “tienen la personalidad de un perro y la practicidad de un gato, porque son juguetones como un perro y responden de manera similar, pero con la ventaja del gato que ocupa poco espacio, por lo que es ideal para apartamentos o casas con poco jardín”.

Los cuidados sanitarios son los mismos que se aplican a un perro: se les administra las mismas vacunas, desparasitario y antipulgas, pero en menor dosis.

Los hurones comen alimento para gatos cachorros de gama alta y se puede suplementar con carnes vacunas y de pollo. En caso de dudas, hay que consultar con el veterinario tratante qué se le puede dar y qué no, ya que si la mascota mantiene una mala dieta, eso puede causar graves problemas y una expectativa de vida menor.

Los hurones, por lo general, comen muy poco, por lo que no vale la pena escatimar en la calidad de la comida. Deben consumir mucha proteína y grasa, pero poca fibra. Lo ideal es dejarles la comida al alcance y ellos se administran; comen cada tres horas normalmente.

Algo que destaca el criadero es que, al comer poca cantidad, a la larga los costos de tener un hurón son menores en comparación, por ejemplo, a si fuera un perro.

Otra cosa que se recomienda es cortarle las uñas, ya que los hurones no suelen afilárselas como acostumbran hacer los gatos en rascadores. Si no se las cortan, se pueden enganchar en objetos de tela, por ejemplo. De todas maneras, hay muchos dueños que optan por dejárselas al natural.

En cuanto al aseo, no se recomienda bañarlo más de una vez al mes, siendo lo ideal bañarlo solo cuando se ensucia jugando con tierra o después de llevarlo a la playa. No es recomendable bañarlo demasiado seguido porque las glándulas de su piel comenzarán a producir mucha secreción y desprenderá más olor.

Cada hurón tiene su propia personalidad, algo que también varía por el trato que se le dé en el hogar. Por lo general, estos animales son muy juguetones, tienen mucha energía (dicen que más las hembras que los machos) y les gusta estar acompañados, por lo que muchos propietarios tienen dos hurones o en conjunto con otra mascota.

Se llevan bien con los niños, pero los responsables del criadero aclaran que siempre tiene que hacerse responsable un adulto por los cuidados que requieren como cualquier otra mascota.

Con respecto a la convivencia de los hurones con otros animales, se llevan bien con los que son carnívoros como ellos. Internet está inundado con videos de hurones que juegan con perros y gatos, por ejemplo.

Con los que sí hay que tener cuidado es con los herbívoros y los roedores, ya que pueden llegar a atacarlos por instinto.

Además, el lugar donde vaya a vivir el animal tiene que estar acondicionado, por ejemplo, para que no se meta en lugares como desagües o sitios a través de los que se pueda escapar.

Comprar un hurón en un criadero uruguayo sale hoy en día alrededor de US$ 750.

El animal se entrega ya castrado cuando tiene unos cuatro meses de vida. También, antes de ir a casa con su nueva familia, se le aplica un antipulgas, junto con la vacuna antirrábica y distemper (joven edad).

En Vip Mascotas, por ejemplo, el hurón se entrega junto con una jaula transportadora con la cual ya está familiarizado, para que el cambio sea menos estresante. También se lleva algo de comida para continuar su dieta o, de lo contrario, para cambiar de alimento de forma paulatina.

Además, en este criadero entregan un paté “de premio”, uno de los favoritos de estos animales, para facilitar que entre en confianza. En el kit también hay un alicate para cortarle las uñas.

Los hurones domésticos viven en promedio ocho años, pero pueden llegar a vivir algunos más.

En Vip Mascotas los castran cuando tienen casi cuatro meses de vida. Hay quienes los castran antes pero, según los veterinarios, está comprobado que la castración temprana es perjudicial para la salud del animal.

Algo que muchos hacen al momento de castrarlos es extraerles las glándulas anales, con el fin de evitar que la mascota tenga mal olor a futuro. Pero hay quienes no lo hacen porque sostienen que no es bueno, como es el caso de este criadero, cuyos propietarios aseguran que esas glándulas “solo son utilizadas si el hurón se ve atacado y también está comprobado que sacárselas conlleva a problemas de salud y hasta una muerte más temprana”.

En promedio nacen unos ocho hurones por cada camada, aunque las hembras más jóvenes tienen camadas más chicas.

Son muchos los uruguayos que están apostando por esta mascota y en Facebook, por ejemplo, hay un grupo llamado “Hurones de Uruguay” que tiene más de 4.000 integrantes. Se trata de fanáticos de este animalito, aunque no todos tienen uno en casa.

En Vip Mascotas se dedican a la venta de hurones en Uruguay desde hace dos años. Sostienen que, si bien muchas veces reciben críticas, su actividad es totalmente legal y que cuidan a los animales como si fueran suyos: “Somos un grupo de amigos y allegados que cada uno tiene uno o dos hurones como mascotas y los cruzamos una vez al año siguiendo los ciclos naturales. Ni hablar de que al ser nuestras mascotas los tenemos en condiciones inmejorables. Aunque, lamentablemente sí es cierto que hay criaderos en el mundo que se preocupan poco por el bienestar de sus animales, algo que pasa con todas las especies”, dijeron a El País.

Ellos, por cada compra de un hurón, hacen una donación de ocho kilos de comida a un refugio de animales que tenga a sus animales en buenas condiciones, con el fin de concientizar y motivar a que más personas donen.