La Nación/GDA
El Día de Santa Marta de Betania se conmemora cada 29 de julio, que celebra a la hermana de Lázaro y María de Betania, y amiga de Jesús. Se considera la patrona de los imposibles, del hogar, de las cocineras, amas de casa, casas de huéspedes, hoteleros y lavanderas, y referente en decenas de ciudades en todo el mundo.

Es venerada por la Iglesia Católica y la ortodoxa por su rol servicial y generoso hacia Jesucristo y sus apóstoles. Muchas naciones del mundo realizan celebraciones durante esta jornada y los fieles le rezan el día martes para pedirle asistencia en diferentes causas.

De acuerdo a los Evangelios, Marta era la hermana de Lázaro y María, una familia que residía en Betania, un pequeño pueblo aldeano ubicado cerca del Monte de los Olivos a tres kilómetros de Jerusalén. Gracias a esta cercanía, el clan creó lazos con Jesús, quien se convirtió en un amigo y huésped recurrente. Abrieron sus puertas para recibirlo, junto a sus apóstoles y así esconderse de quienes lo perseguían.

Los hermanos enfrentaron un gran desafío con la muerte de Lázaro. Sin embargo, gracias a un milagro de Cristo, junto a María fueron testigos de su resurrección. Tras este suceso, debió hacerse cargo de la casa y Jesús la alentó, por lo que se la considera como la patrona del hogar y las amas de casa: “Marta, Marta, te preocupas y te agitas por muchas cosas; y hay necesidad de pocas, o mejor, de una sola. María ha elegido la parte buena, que no le será quitada” (Lucas 10: 41-42).

Foto: Wolfgang Moroder / Commons

Muchos la veneran por su espíritu servicial y bondadoso, capaz de dar confort a todo el mundo. En la fe católica se la considera como una figura de cuidado y auxilio de quienes lo necesitan. Los fieles recurren a sus rezos para pedir ayuda en situaciones de emergencia o dificultades.

La Iglesia Católica de Montevideo, en su tradicional "Evangelio del Día" que comparte en redes sociales, difundió uno que involucra a Santa Marta.

Se trata de Juan 11: 19-27: "Jesús le dijo: «Tu hermano resucitará». Marta le respondió: «Sé que resucitará en la resurrección del último día». Jesús le dijo: «Yo soy la Resurrección y la Vida. El que cree en mí, aunque muera, vivirá; y todo el que vive y cree en mí, no morirá jamás. ¿Crees esto?» le respondió: «Sí, Señor, creo que tú eres el Mesías, el Hijo de Dios, el que debía venir al mundo»".

Tal como señala la Agencia Católica de Informaciones (ACI), la oración para pedirle a Santa Marta de Betania por cualquier necesidad es la siguiente:

Oh Santa Marta dichosa, que tantas veces tuviste el honor y la alegría de hospedar a Jesús en el seno de tu familia, de prestarle personalmente tus servicios domésticos, y que juntamente con tus santos hermanos Lázaro y María Magdalena, gozaste de su divina conversación y doctrina, ruega por mí y por mi familia, para que en ella se conserve la paz y el mutuo amor, para que todos sus miembros vivan en la observancia de la Ley de Dios, y para que solo Dios, y no el mundo ni el pecado, reine en nuestro hogar.

Libra a mi familia de toda desgracia espiritual y temporal, ayúdame en el cuidado de mis hijos y subordinados, y concédeme la dicha de verlos unidos bajo la mirada paternal de Dios en la tierra, para volver a verlos reunidos en las moradas del cielo.

Así sea. Amén.