Redacción El País
Julio se despide por todo lo alto, con una lluvia de meteoros que alcanzará su pico y se volverá visible desde el hemisferio sur.

Se trata de la lluvia de meteoros Delta Acuáridos formada a partir de los escombros del cometa 96/Machholz. Pese a que su visita anual ocurre entre el 12 de julio y el 23 de agosto, alcanzará su pico la madrugada del 29 de julio, según informó el Observatorio Astronómico Los Molinos.

"Durante el pico se esperan de 15 a 20 meteoros por hora en condiciones ideales", añade el observatorio e indica que el mejor momento para disfrutar de este fenómeno será a las 2:00 AM del 29 de julio.

El Instituto Geográfico Nacional de España explica que estas lluvias de meteoros ocurren cuando la Tierra "se cruza con el camino orbital de un cometa", haciendo que las partículas de la cola del cometa entren a la atmósfera terrestre a gran velocidad. Cuando estas se calcinan, se crea el resplandor luminoso.

Lo preferible es tener pocos obstáculos a la vista, como pueden ser árboles o edificios, pero no es necesario utilizar herramientas ni elementos ópticos porque pueden obstaculizar la visión.

Todo indica que las Delta Acuáridas provienen de la constelación de Acuario, pero estas podrán verse desde cualquier parte del cielo -si las condiciones lo permiten- y lo recomendable es dirigir la vista a las zonas más oscuras, es decir, las más alejadas de la Luna.

Lo ideal es recostarse con la vista hacia el cielo y esperar a que los ojos se acostumbren a la oscuridad.

Las Delta Acuáridas podrán ser vistas desde cualquier lugar de observación siempre y cuando el cielo esté oscuro. Según el pronóstico del Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet), el cielo se mantendrá nuboso y cubierto al menos hasta este domingo, mientras que el pronóstico extendido descarta la probabilidad de lluvias para el lunes.

Lo que sí se debe tener en cuenta es una advertencia que emitió Metsul, el instituto de meteorología del sur de Brasil, que prevé un marcado descenso de las temperaturas a partir de la semana entrante, lo que podría dificultar la espera de la lluvia de meteoros al aire libre.

Foto: archivo.