El Universal/GDA
Un recurso desaprovechado suele ser el agua que liberan los aires acondicionados, pese a que en realidad tiene múltiples usos prácticos.

Es que durante la temporada de verano, los sistemas de aire acondicionado generan alrededor de 1 litro de agua por cada una o dos horas de uso, mediante el proceso de condensación de la humedad en el aire.

• En la plancha de vapor para evitar la acumulación de cal: el agua condensada puede utilizarse en la plancha de vapor, lo que ayuda a prevenir la acumulación de cal y prolonga la vida útil del electrodoméstico. Además, este método contribuye a mantener tus prendas en perfecto estado, ya que evita la liberación de minerales no deseados durante el planchado.
  
• Como agua de último aclarado para suavizar la ropa: emplea el agua condensada como último enjuague al lavar la ropa. Este uso proporciona a tus prendas un acabado más suave y reduce la necesidad de suavizantes químicos. Además, al integrar este recurso en tu rutina de lavado, contribuyes a un consumo más consciente y sostenible del agua.
  
• Como agua de riego para tu jardín: utiliza el agua generada por el aire acondicionado para regar tu jardín. Aunque este recurso carece de minerales esenciales para el cultivo de alimentos, puede proporcionar un beneficio adicional a tus plantas ornamentales. Esta práctica ayuda a reducir la demanda de agua potable en tareas de jardinería.
  
• Para limpieza y lavado de suelos: integra el agua condensada en tus tareas domésticas, como la limpieza de superficies y el lavado de suelos. Este enfoque no solo aprovecha un recurso previamente desaprovechado, sino que también contribuye a una gestión más eficiente del agua en el hogar, especialmente en áreas propensas a la escasez.
  
• Para el funcionamiento de inodoros: dedica esta agua no potable de tu aire acondicionado al tanque de descarga de tus inodoros. Al hacerlo, reduces el consumo de agua potable en tareas no esenciales y das un paso hacia la conservación del recurso hídrico.