TIEMPO LIBRE
En el viejo cine La Floresta, funciona un lugar con propuestas para todas las edades a cargo de dos gestoras culturales vinculadas desde siempre al balneario canario.
"Hay como un cliché de que en La Floresta no hay nada para hacer, que solo está la playa. Es un balneario medio quieto, es hermoso, pero está como un poco detenido en el tiempo, con casas de principios del siglo XX”. Alicia Escardó, veraneante de La Floresta de toda la vida, sabía que tenía que hacer algo con esa imagen de su querido balneario canario. Su amiga Sussy Asuaga, que vive y vivió allí toda su vida, compartía esa idea.
Como gestoras culturales tenían herramientas para darle al lugar lo que le faltaba. “La especialidad de Sussy es la docencia, incluso tuvo un colegio; mientras que yo soy escritora y gestora cultural. Perfiles distintos, pero nos complementamos”, señaló Escardó.
El objetivo era ofrecer un espacio “donde encontrarse y disfrutar de propuestas y actividades relacionadas con el entretenimiento y la cultura”. Se les ocurrió entonces que todo eso podía pasar en el anexo del viejo edificio de apartamentos de la calle Argentina y 33, donde alguna vez funcionó un casino y luego un cine, y que hacía un año y medio que estaba vacío.
Es así que en setiembre de este año nació Espacio de Creatividad y Arte, más conocido como Espacio CRA, con una amplia oferta cultural que incluye talleres y clases semanales de diferentes disciplinas artísticas, fotografía, espectáculos, obras de teatro, cine-forum, toques, recitales y exposiciones.
Mural pintado por los liceales
Una de las actividades de este año fue el mural creado por el artista plástico Claudio del Pup, siguiendo el estilo madí, una vanguardia de los años 40. Se le propuso a la directora del liceo de La Floresta que fuera pintado por los alumnos. Los estudiantes se anotaron en forma voluntaria y realizaron la tarea en dos turnos. Pintaron todas las piezas y luego se lo colgó en Espacio CRA. “La verdad que se coparon y fue lindísimo verlos entusiasmados”, señaló Alicia Escardó sobre una iniciativa que va en el camino de captar al público adolescente del balneario, uno de los públicos más difíciles. Hasta ahora, jóvenes y adultos son los que más participan.
Propuesta.
“Lo interesante es tratar de generar cosas para la gente que vive todo el año y para la comunidad no solo de Floresta, sino también de Costa Azul, Parque del Plata, inclusive de Atlántida y combinarlo con actividades para hacer en verano”, detalló Escardó.
Comenzaron con propuestas para la gente que vive en La Floresta, como cine para la escuela del balneario, teatro, yoga, danza estilo Bollywood, tango y un club de lectura. La escuela de música El Barco, de Silvina Gómez, en la que se enseñan seis instrumentos, se mudó para allí con sus más de 40 alumnos. También organizaron cine-forum, que consiste en proyectar una película y luego discutirla en grupo.
Durante estos meses han ofrecido actividades puntuales, como el taller para tejer mantas, té con arte o la organización de una ludoteca. “Cerramos la calle con el permiso del Municipio para que los chicos pintaran y estuvo precioso. Siempre queremos que, aunque se trate de una actividad gastronómica, tenga una expresión artística que la acompañe”, dijo Escardó.
Además, cuentan con espacios alquilados, caso del taller del artista Claudio del Pup o el local Quimera Arte en Vidrio, con objetos hechos por la artista Lucía Escardó con botellas de vino desechadas. Eso les permite solventar los gastos de funcionamiento.
“En la sala de cine y teatro, parece que entrás al túnel del tiempo por las butacas antiguas, pero está en muy buen estado porque no ha tenido un uso tan intenso”, señaló la gestora sobre un lugar que no requirió de mucha inversión edilicia dado que estaba siendo mantenido por una fundación que recibía fondos de Estados Unidos. “Hubo que cambiar algún piso, pintar... hacer refacciones sencillas, no cosas estructurales”, aclaró.
Tienen el apoyo de la Intendencia de Canelones y de algunos privados y van en busca del Ministerio de Turismo, el Ministerio de Educación y Cultura y los comerciantes de la zona. Además, están pensando en crear un Sistema de Amigos CRA que contribuyan con cifras pequeñas mensualmente.
Escardó y Asuaga son dueñas de la productora cultural CRA desde hace cinco años. “En broma, cuando hacíamos algo y nos salía bien, decíamos ‘¡pah!, pero la verdad que somos crá, está bueno esto”. Medio en broma, medio en serio, así es como se sienten ahora con Espacio CRA y lo que vienen logrando en su amada Floresta.
Lo que se viene para el verano y el año
Son muchos los planes que tiene Espacio CRA para 2020. Lo primero en lo que piensan es en el verano y está la idea de crear una colonia de vacaciones, en principio para las horas en las que no se puede tomar sol. Dentro del rubro musical, hay intenciones de organizar un festival de jazz, otro de rap y uno de bandas emergentes. También un festival de cortos hechos con celular. “Queremos hacer dos festivales en enero y dos en febrero”, contó Alicia Escardó a El País.
Además habrá teatro en diciembre, con el estreno de Aullidos, de Rubén Coleto, y la obra de teatro para niños Iris y el Ratón Pérez, de María Noel Toledo.
“Pensamos hacer muchas cosas cerrando la manzana alrededor del edificio. Además, tenemos cuatro espacios que se pueden usar en simultáneo”, agregó la productora.
En cuanto al resto del año, tienen previsto varios talleres, tres o cuatro de los cuales comenzarían en marzo. En general son pagos, pero se beca a uno o dos alumnos por taller.
Hay una propuesta muy innovadora de realizar una Residencia para Escritores, coordinada por el escritor argentino Juan Solá. Se invitaría a unos cuantos escritores argentinos –ya hay varios entusiasmados– y uruguayos y se los alojaría en los bungalows del edificio para tres días de actividades.
Para Semana Santa, se planifica una jornada de meditación con el Método Osho.
También se armará una biblioteca con libros donados por la gente que se venderían a $100 o $150. Otra posibilidad es que donen dos libros y se lleven uno.
Y ya los contactaron interesados en celebrar un festival de coros en julio. “La verdad que es increíble la cantidad de propuestas que nos llegan; sin duda había necesidad de crear este espacio”, destacó Escardó.