El gobierno de China declaró la guerra a los dispositivos que permiten el acceso en internet a sitios que no le agradan.
El cierre fue inusual y llegó sin advertencia. Los censores de China probaron, el jueves pasado, una nueva manera de cerrar los sitios web y cortar a los usuarios de internet al acceso al resto del mundo. El ejercicio de control apuntó a las herramientas que muchos usan en China para eludir el vasto sistema de censura online, aunque las empresas de internet señalaron que también golpeó a algunos sitios por azar.
Una empresa de videos online de Pekín vio como su app y sitio web estuvieron cortados durante 20 minutos, sin advertencia. La manera en que fue desconectado —fue afectado el enlace digital que conecta su servicio al resto de internet— sugiere más que una falla técnica, de acuerdo con el líder del equipo tecnológio de la empresa, quien pidió que su identidad y la de la firma se mantengan en reserva por temor a represalias.
Las autoridaes chinas no hicieron comentarios sobre la prueba, y no hubo indicios de que usarán el sistema de nuevo. Pero, si lo hacen, no será una sorpresa total.
China se ha embarcado en una campaña en internet que apunta a un giro profundo en la manera cómo encara la censura online. Durante años, el gobierno chino pareció contento con los métodos que aplica para impedir que la mayoría de los habitantes lea los materiales que no le gustan a las autoridades, por ejemplo en Facebook y Google. Los que conocen de tecnología o tienen una actitud muy perseverante, señalan que China con frecuencia tolera un poco de margen de maniobra, dejando a los usuarios de internet el juego del gato y el ratón con los censores, lo que ha ocurrido durante más de una década.
Ahora, las autoridades tienen como blanco las herramientas que muchas personas usan para saltar sobre la Gran Muralla de la censura. En los últimos días, Apple suprimió las apps que ofrecen acceso a esas herramientas —son las llamadas VPN o redes virtuales privadas— de su tienda online en China, mientras el socio chino de Amazon advirtió a los clientes de su servicio de computación en nube en contra del uso de esas herramientas en sus sitios. Durante los últimos dos meses, varias de las más populares VPN chinas fueron cerradas, mientras dos sitios populares que albergan programas de televisión y películas extranjeros fueron vaciados.
El cambio —que puede afectar a una franja de los usuarios, desde investigadores hasta empresas— sugiere que China tiene creciente preocupación sobre el poder de internet, indicaron los expertos.
"Parecería que la persecución se hace más intensa, aunque internet también es más poderosa que nunca", considera Emily Parker, autora de un libro sobre el poder de internet en China, Cuba y Rusia. "La represión que hace Pekín es de la magnitud del poder de internet allí".
China todavía no controla todo de acuerdo con su plena capacidad para hacerlo, y en muchos casos revela que continúa el juego del gato y el ratón, señalan expertos. Un día después de la decisión de Apple, en las redes sociales chinas comenzó a circular una manera muy fácil de ganar acceso a esas herramientas. Involucró el registro de la tienda app de una persona en otro país donde las VPN están disponibles.
Pero, el ejercicio del jueves pasado muestra que China quiere cambiar la situación en favor del gato.
Algunos estudios indican que hasta más de 100 millones de chinos usan las VPN y otro tipo de software para eludir la Gran Muralla.
Es cada vez más difícil eludir la restricción.
Los controles que aplica el gobierno han evolucionado, a medida que el ciberespacio se ha convertido en un elemento más central de lo que ocurre en China. Resulta difícil saber el alcance de los nuevos esfuerzos. Pero, algunos usuarios frecuentes indican que es cada vez más difícil lograr eludir las restricciones.
TECNOLOGÍATHE NEW YORK TIMES