El viernes 22 de diciembre, Gustavo Yankelevich llegó más temprano de lo habitual al Enjoy: quería acompañar a la diva Susana Giménez en un estreno histórico. Y no lo hizo solo en calidad de amigo entrañable de la estrella argentina, sino también como productor de La piel de Judas, la obra con la que Susana le dirá adiós a las tablas.

Consultado por El País sobre si lo tomó por sorpresa la noticia de este retiro de los escenarios, Yankelevich confesó: "Lo que me tomó por sorpresa fue que me haya dicho que estaba para hacer el verano, yo creí que ya ella no iba a volver a hacer teatro porque hizo un éxito en el invierno y le dije, 'ahora te falta hacer en el verano'; es otro público, vienen más turistas, y lo aceptó. Así lo me sorprendió fue que me dijera que sí, no que se iba".

Y reveló que fue él quien le aconsejó decir que era su última obra: "En principio ella me dijo, 'no quiero decir que me despido'. Y le digo, Susana, '¿vas a hacer otra obra?' Y me contestó que no. 'Entonces si es no, digámoslo, que la gente sepa'.

Sin embargo, y a pesar de que todos los carteles y banners lo digan, le productor aún no toma dimensión de que esto es una despedida: "Todavía no lo siento así, creo que lo voy a sentir en la última función, el último fin de semana. Y tampoco es que lo quiera sentir porque la verdad es que es fuerte que ella se despida.

Declaró, además que el esperado proyecto de rodar la biopic de Susana Giménez quedó en stand by: "Está latente, está siempre presente, pero por ahora no está".

Por último,Yankelevich dijo a El País que si bien siempre tiene a algún artista en vista con el o la que le gustaría trabajar, aún no piensa en nuevos proyectos: "Voy paso a paso".