Actualidad
Fue donada por un vecino de la zona hace 40 años y hoy su trabajo es clave para la preservación de la fauna autóctona del Uruguay.
Para muchos uruguayos, niños y adultos, el paseo por la famosa reserva de fauna del Cerro Pan de Azúcar es un paseo tradicional del este del país. La Estación de Cría de Fauna y Flora autóctona de Uruguay Tabaré González –nombre completo del lugar– cumple 40 años desde su fundación en 1980.
La reserva surgió luego de que Tabaré González, un vecino naturista de la zona, donara su colección privada de animales con el objetivo de preservar la fauna autóctona. Fue entonces cuando la Intendencia de Maldonado cedió el predio de lo que fue una antigua cantera de granito para crear el recinto donde animales y plantas nacionales serían conservadas. Su emprendimiento le valió el Premio Nacional de Medio Ambiente por su trabajo por la conservación.
Brenda Bon, directora de la Estación de Cría de Flora y Fauna, explicó a El País que, con los años, la reserva ha ido ganando relevancia y que sus objetivos de gestión y conservación evolucionaron con el tiempo.
“Durante el tiempo de Tabaré González se hizo énfasis en la parte animal, pero en los últimos años nos abocamos también a la gestión y a que sea una instancia de educación y turismo”, añadió la directora del lugar que recibe alrededor de 600 mil personas al año.
Bon destacó la importancia de la Estación de Cría, ya que fue declarada tres veces de interés nacional y patrimonio histórico natural: por las pinturas rupestres que se encuentran el Cerro Pan de Azúcar, el programa de reproducción de venados de campo y su población que es la más importante del mundo; y la reserva en sí misma.
Bon destacó el trabajo de todo el equipo que trabaja en el parque y el proceso de profesionalización que ha experimentado en los últimos años, que incluyó un convenio con la UTUde Arrayanes para la formación de guardaparques profesionales.
El objetivo de la organización es la conservación y la reproducción de las especies autóctonas. Además, se busca promover el turismo de naturaleza con distintos senderos y el ascenso al cerro Pan de Azúcar.
El proyecto para recuperar venados de campo
Brenda Bon, directora de la reserva de fauna y flora, destacó la importancia de trabajar con el venado de campo (ozotoceros bezoarticus) y cómo la Estación de Cría tiene la población más grande del mundo de estos animales con 120 ejemplares.
“Hemos encarado con la academia distintos estudios sobre su desarrollo, especialmente la reproducción”, explicó la directora del lugar a El País.
Por otro lado, detalló que en el marco de los 40 años de la estación de cría, la Dinama y la academia aprobaron una inversión para que se siga investigando y se divulgue sobre este animal del que “no se sabe mucho” porque existen muy pocas poblaciones que viven de manera silvestre. “Es nuestra responsabilidad seguir desarrollando un proyecto que fue idea del fundador Tabaré González”, aseguró Bon y resaltó que el estudio de la especie y su reintroducción a la vida silvestre es uno de los grandes objetivos que tiene la Estación de Cría y que ha sido reconocido como monumento natural.
Por otro lado, durante la pandemia nació un venado al que llamaron “Coronavida”: “Mientras todo el mundo estaba muy asustado en la Estación de Cría todo era vida y por eso le pusimos ese nombre”, contó.
Entre los logros de la Estación de Cría destacan el proyecto de preservación del venado de campo oel trabajo de reinserción del pecarí de collar (Pecari tajacu) en la naturaleza.
Para un mejor trabajo, se ha formado a diferentes funcionarios con cursos especializados y dictados en el Parque Lecoq, así como el trabajo científico que se realiza con el Instituto de Investigaciones Clemente Estable, la Facultad de Ciencias y Facultad de Veterinaria de la Universidad de la República.
El apoyo de los vecinos es clave
Desde hace dos años, los vecinos de la zona interesados por la conservación y mejora del lugar formaron la Comisión de Apoyo de la Estación de Cría de Fauna. Este grupo junta fondos a modo de bono colaboración y voluntariamente se encarga de proyectos macro como el reacondicionamiento de espacios para el bienestar de los animales. Por ejemplo, uno de los proyectos que ha tomado fue la creación de un nuevo recinto para los jaguares que, según Branda Bon, tendrá hasta calefacción para que los animales estén cómodos. Además, este grupo facilita el acceso a algunos medicamentos veterinarios que salvan vidas.
Alivio en la pandemia
Durante la crisis por la expansión del coronavirus, la Estación de Cría permaneció cerrada al público. Sin embargo, el trabajo del equipo continuó por tratarse de un servicio esencial y tener a su cargo más de 300 animales de 53 especies diferentes.
“En la estación venimos trabajando en modalidad presencial, algunos con teletrabajo, pero preparándonos para el retorno”, explicó Bon, quien además señaló que son unos 50 funcionarios los que trabajan en la reserva.
“El parate vino muy bien para la regeneración del hábitat. Los animales están muy desestresados”, enfatizó la directora de la estación de cría.
Sobre el regreso de la actividad de la reserva señaló que la decisión depende del intendente de Maldonado: “Seguramente hasta fin de mes no va a estar esté habilitada para que la visiten”, sostuvo.