Tecnología
"Buscar, reservar y tocar". Con estos tres sencillos pasos la nueva aplicación "Music Traveler" pretende solucionar uno de los mayores problemas que tiene los músicos en todo el mundo: la falta de espacio barato dónde ensayar.
La plataforma, que comenzó a funcionar hace unas semanas en Viena, eliminar intermediarios y pone a disposición del músico, a precios asequibles, locales, e incluso instrumentos, para ensayar sin preocuparse por vecinos, familia o compañeros de piso.
La aplicación tiene un mecanismo parecido a Airbnb, pionera para el alquiler de viviendas en todo el mundo.
A través de filtros se puede seleccionar la ciudad, el día, la hora, el tamaño del local, el rango de precios y la necesidad de alquilar algún instrumento en especial.
Una vez definidas las prioridades, Music Traveler muestra un mapa con todas las ofertas, desde grandes salas de conciertos con un piano de cola por 20 euros la hora en el centro, hasta un pequeño despacho con un xilófono por 7 euros en las afueras de la ciudad.
La idea detrás de Music Traveler es que cualquiera puede convertirse en un ofertante de espacios, siempre que tenga una habitación libre.
El violinista ruso-alemán Aleksey Igudesman es uno de los fundadores de la plataforma y ofrece su propio apartamento en Viena, la única ciudad donde de momento está disponible este servicio.
El espíritu de Music Traveler es "darle valor al poder de abrir las puertas a la gente", cuenta en declaraciones a Efe.
El grupo, que "Trio KlaVis" ha usado la plataforma desde el primer momento, considera que era algo que el mundo de la música necesitaba.
"Cuando éramos estudiantes hacíamos largas colas para conseguir una sala, para tener que abandonarla pocos minutos después de haber comenzado el ensayo", recuerda Miha Ferk, saxofonista del grupo.
Asegura que encontrar un espacio donde ensayar durante horas era antes "casi imposible" y que la plataforma facilitará su trabajo también en el extranjero.
"Cuando incluyan más ciudades podremos olvidar el estrés de dar un concierto sin poder haber practicado nada antes por falta de espacio", comenta Jenny Lippl, violinista del conjunto.
Según destaca Igudesman, la seguridad es uno de sus prioridades y que por eso cuentan con un seguro que cubre con hasta 100.000 euros el valor de los instrumentos.
La idea de Music Traveler nació en 2015 por pura necesidad. Igudesman y su socia, Julia Rhee, empresaria y ex pianista profesional, habían vivido en múltiples ocasiones el estrés de no poder ensayar cuando viajaban al extranjero.
En declaraciones a Efe, Rhee cuenta que desde un principio estaban seguros de que habría clientes ya que "para un músico profesional perder horas de ensayo implica perder dinero".
Aunque en un principio la idea era ofrecer locales para músicos clásicos, la investigación que realizaron les reveló que la falta de espacios para ensayar era "un problema crónico en el mundo de la música" en general, por lo que la abrieron a otros estilos.
El éxito de la plataforma tiene también relación con la elección de Viena como "ciudad piloto", debido a su condición de centro mundial de la música en la que tocan más de 250.000 músicos, unos 50.000 de ellos profesionales.
Otra ventaja son las ayudas económicas que ofrecen los organismos públicos austríacos y que son, según Rhee, "de los pocos que valoran la creatividad en el mundo de las startup".
La empresa contó desde su nacimiento con inversores famosos como el compositor alemán de bandas sonoras Hans Zimmer, el cantante Billy Joel o el actor John Malkovich.
Rhee considera clave para el éxito que los inversores hayan visto que otras "startup", como Airbnb, se han transformado luego en empresas altamente rentables.
Tras la buena acogida que tuvo la plataforma en Viena la compañía busca extenderse de forma rápida pero segura. "Si no aprovechamos nuestra ventaja, se va a convertir en una competición en el que ganará el que consiga más dinero y se mueva más rápido", asegura.
De momento la expansión será europea, ya que "en Estados Unidos la legislación es más complicada y pone más trabas", aunque ya están realizando pruebas en Nueva York.
Los primeros destinos a los que se expandirá la compañía son capitales regionales austríacas, como Salzburgo, y las ciudades alemanas de Berlín, Múnich, Colonia y Hamburgo.
En el caso de España "Madrid y Barcelona son objetivos claros", concluye Aleksey Igudesman, fundador de Music Traveler.