El Tiempo/GDA
CoCo y Deitrick Bates, una pareja oriunda de Estados Unidos, tomó la decisión de establecerse en un país que tuviera un costo de vida más económico, ya que tenían que lidiar con ingresos reducidos y buscaban algo de tranquilidad.
Deitrick Bates es un veterano del ejército estadounidense, quien prestó su servicio en Irak durante el año 2003, durante el cual comenzó a desarrollar un trastorno de estrés postraumático y durante la pandemia del 2021 sus síntomas comenzaron a ser más notables, según lo explicó su esposa CoCo a CNN.
En ese entonces, el hombre trabajaba como controlador aéreo de la Administración Federal de Aviación de EE. UU., pero cada vez que se preparaba para ir a cumplir con sus labores, su pareja lo notaba “tenso”, lo que la llevo a pensar que “estaba a punto de derrumbarse”.
Además, tenían que enfrentarse a sus problemas económicos, lo cual los hizo considerar el dejar Estados Unidos: “Podemos solucionar esto en otro sitio. Hay lugares que son menos caros que EE. UU., sin su clima, el estrés que hay aquí”, recordó CoCo.
La pareja de Deitrick Bates, quien trabajaba como gestora de proyectos en un estudio de taekwondo, comenzó a buscar algunas opciones y encontró unos pasajes para Costa Rica, así fue como tres meses después iniciaron su travesía y su nueva vida.
“Ninguno de los dos había estado nunca en Costa Rica, sin hablar nada de español, sin amigos, sin parientes, sin nadie, solo nosotros dos. Y simplemente dimos el salto. Fue absolutamente aterrador, no puedo creer que mantuviera la calma”, agregó.
La mujer confesó que “siempre ha sido muy optimista por naturaleza y de espíritu libre”.
En el transcurso de tres años, CoCo comenzó a pintar, elaborar cerveza y ejerció su título de hotelería y turismo como chef privada para vacaciones y retiros que eran organizados uno una de sus amigas, mientras que su esposo recibió el dinero de jubilación por motivos médicos de la Administración Federal de Aviación de EE. UU. en 2023.
Pese a que disfrutaron de la calma, los paisajes y las oportunidades de Costa Rica, su vida tuvo un cambio inesperado al organizar un viaje con una pareja estadounidense que tenía una vida parecía a la de ellos, dejando como destino a las islas de San Blas, en Panamá.
Allí encontraron una ciudad que era más parecida a lo que se veía en Estados Unidos, con servicios de domicilios a la puerta, disponibilidad de comodidades, acceso a productos importados que tenían un menor precio y una mayor facilidad en la movilidad.
“Para mí es más cómodo aquí porque es más a lo que estoy acostumbrado”, dijo Deitrick, originario de Arkansas.
Analizaron los costos de vida de Panamá y notaron que era más económico que Costa Rica, lo cual los llevó a tomar la decisión de vivir allí, para lo cual contaron con la ayuda de una empresa de reubicación para inmigrantes que les permitió obtener la residencia, según el medio mencionado.