URBANISMO

Rodrigo Llavayol, un joven arquitecto uruguayo especializado en iluminación, fue premiado en Barcelona en el marco de los Lamp Awards 2019, competencia internacional que convocó a más 500 profesionales de 42 países del mundo y que contó con un prestigioso jurado de peso mundial.

El proyecto de Llavayol, denominado “¡La luz sigue la función!”, fue elegido como ganador dentro de la categoría Estudiantes e Ideas a Ejecutar. Se trata de una intervención lumínica en la plaza Superkilen de Copenhague (Dinamarca) que utiliza una malla elástica y luminarias circulares de policarbonato que se desplazan sobre esta, las que pueden ser movidas por los transeúntes, “apropiándose así del espacio y generando diferentes atmósferas”.

El arquitecto, colaborador de la cátedra de Acondicionamiento Lumínico de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de la República, planteó “potenciar la capacidad de comunicación de la plaza hacia el exterior, haciendo de este un lugar más inclusivo”.

Los Lamp Awards 2019 son la octava edición de este concurso de iluminación que se realiza cada dos años.

“Presentarse a estos concursos lleva mucho esfuerzo y tiempo. Hay que presentar láminas, maquetas, esquemas, videos, etc., pero sin duda vale la pena cada minuto invertido. Recibir el premio en una ciudad vanguardista como Barcelona tiene un valor particular”, relató a El País.

Las propuestas fueron analizadas por los arquitectos Hilde Leon (Alemania) y Antonio Ruiz Barbarin (España), los diseñadores de iluminación Roger Narboni (Francia), Uno Lai (Taiwán), Paul Nulty (Reino Unido) y Pascal Chautard (Chile), la lighting artist Aleksandra Stratimirovic (Suecia) y la interiorista Mercedes Isasa (España).

Este no es el primer reconocimiento internacional de Llavayol. En 2018 fue finalista del concurso organizado Ligth Collective junto a profesionales de Finlandia, Reino Unido, Francia, Dinamarca, entre otros. En este caso, el uruguayo recreó “la noche” dentro del “bosque” de Antoni Gaudí en el interior del Templo Expiatorio de la Sagrada Familia de Barcelona. “Para lograr esta experiencia de luz, planteo la recreación de la luz emitida por las luciérnagas para crear una atmósfera propia de un bosque, inspirada en la naturaleza”, dijo a El País.

Por medio de un juego de luces, que permiten combinar la oscuridad y la ausencia de esta, Llavayol plantea una experiencia de luz perfecta inspirada en la naturaleza, generando una atmósfera de misterio que invita a contemplar el espacio. “El diseño de la iluminación es esencial en un obra, le da carácter. Entiendo que la iluminación perfecta es producto del correcto diálogo entre arquitectura y luz”, explicó.

Llavayol es un enamorado de la luz. En este sentido, ¿cuál es el principal reto que enfrenta un diseñador de iluminación? “Entender la esencia de la obra”, precisó. Al igual que los arquitectos que tiene por referentes, le quiere dar un “valor personal”. Y añadió: “En la esencia de la obra es dónde se encuentra la respuesta. Entender su origen, su arquitectura, su función y su mensaje constructivo son las herramientas claves para proyectar”.

Para mejorar la iluminación del hogar, el arquitecto dio la siguiente recomendación: “Es clave apostar por un sistema de control en el hogar. El mismo nos permite crear espacios dinámicos, haciendo posible que la vivienda se adapte a nuestras necesidades”.