Punta del Este vibra con la llegada de la temporada, y como cada verano, su estilo marca la pauta de las tendencias que veremos en playas, fiestas y atardeceres. Este año, las transparencias, los abanicos y las gorras con visera son protagonistas absolutos, y caminar por las calles o asistir a una fiesta es como entrar a un desfile de moda espontáneo.
Nieves Pereyra, estilista de moda, confirmó lo que se respira en el ambiente. “Las transparencias son tendencia absoluta”, dijo a El País, y al observar a los grupos que se mueven por el balneario, es imposible no notarlo. Para la noche, las telas translúcidas o con encaje son infaltables, mientras que durante el día predominan tejidos como el crochet.
“Los vestidos que dejan ver la ropa interior son la tendencia absoluta del verano, y lo vemos trasladado también a las faldas midi, con aplicaciones de encaje y transparencias”, agregó. Mencionó a Zaira Nara como una de las máximas exponentes de este estilo, una referente que por estos días llegó al Este uruguayo.
Otra variante que se destaca es el broderie, una alternativa más bohemia al crochet. “Con reminiscencias del boho chic, el broderie está de vuelta con toda la fuerza. Lo vemos en camisas, shorts y vestidos, aportando un aire romántico y fresco al look”, explicó la experta. Esta técnica, caracterizada por patrones de encaje y motivos florales, tiene sus raíces en el siglo XIX, donde las prendas de algodón bordadas a mano eran símbolo de elegancia y sofisticación.
Hoy en día, se ha industrializado para adaptarse a las necesidades y gustos contemporáneos, pero sin perder ese aire artesanal. Pereyra añadió: “Lo vemos muchísimo en shorts, vestidos y camisas en color blanco. Desde vestidos cortos y largos con cortes fluidos hasta crop tops juveniles, el broderie se presenta en múltiples estilos y siluetas, adaptándose fácilmente del día a la noche mediante el uso de accesorios”. Además, destacó que es una inversión clave: “Con el regreso de la estética boho chic, el broderie blanco es un elemento esencial en el guardarropa de esta temporada y las que vienen”.
Pero no todo se queda en la ropa. Un accesorio que ha tomado por asalto el verano es el abanico. Está por todos lados: en la playa, en fiestas, en sunsets, en las calles. Nieves comentó que el fenómeno comenzó tímidamente en las fiestas electrónicas, como un accesorio para combatir el calor, pero ahora se ha convertido en un verdadero must.
“Vemos abanicos en distintos colores, texturas, holográficos y hasta con frases divertidas. No solo son funcionales, sino que pueden ser la statement piece de un look veraniego. Incluso se han impuesto como regalos personalizados en bodas y eventos”, sostuvo.
Por otra parte, las gorras con visera, que ya venían ganando terreno, se han consolidado como otro elemento imprescindible para completar el look. Tanto hombres como mujeres las usan sin importar el momento del día o el tipo de evento, incluso de noche en las fiestas.
“La famosa gorra de béisbol ha evolucionado más allá del juego, invadiendo los armarios trendy de chicos y chicas. Es práctica, funcional y también perfecta para esos días de mal pelo”, dijo Pereyra. Además, la especialista apuntó otro buen motivo para usarlas: “Una gorra combinada con lentes es la fórmula perfecta para mantener el misterio y el anonimato. Si no, pregúntenle a Leo DiCaprio”, comentó con humor. De colores, de cuero, con apliques, las gorras van mucho más allá de simplemente protegerse del sol.
Así, entre locales y turistas internacionales, en esta temporada de verano en Punta del Este y alrededores la moda respira creatividad y funcionalidad. Las transparencias se instalaron para aportar un aire audaz y sofisticado, los abanicos se colaron como un accesorio que resulta práctico y original, y las gorras llegaron para quedarse y redefinir el concepto de versatilidad. Todo, como siempre, con el toque glamoroso que caracteriza al principal balneario uruguayo.