Redacción El País
El barco Eladia Isabel, el buque que “más conoce las aguas del Río de la Plata” —según lo define Buquebus, la empresa propietaria—, partió del puerto de Montevideo para realizar su último viaje: va hacia Turquía, donde será desguazado.

Este es un barco que no operaba con pasajeros hace nueve años entre ambas orillas del Río de la Plata. Estuvo operativo entre 1994 y 2016, y en 2023 recibió una dura sanción de la Dirección de Aduanas de Argentina, que obligó a retirarlo de Puerto Madero, donde estaba amarrado.

Este ferry, según informó La Nación, será desguazado en Estambul, Turquía, a donde llegará bajo la bandera de Islas Comoras, que suele utilizarse para embarcaciones en tránsito.

Un video divulgado por el usuario de X Marcelo Mascarini muestra su partida de Uruguay hacia Turquía.

Está previsto, según el cronograma de viaje, que el buque llegue a Turquía el 16 de abril. El citado medio argentino indicó que el ferry fue vendido pero no se va a reacondicionar para mantenerse en navegación, sino que será desmantelado para usar algunas de sus partes.

En junio de 2023 la Dirección General de Aduanas de Argentina constató que el Eladia Isabel tenía los certificados de navegabilidad vencidos y que se encontraba en un “penoso estado” amarrado en Puerto Madero.

Foto: AFIP

“El buque de bandera uruguaya que la empresa describe como 'un verdadero crucero' se encuentra amarrado en la 5ta Dársena Norte, en Puerto Madero, en penoso estado. En efecto, agentes de la Aduana que inspeccionaron el Eladia Isabel encontraron mobiliario sumamente deteriorado”, señaló el organismo en un comunicado.

Por entonces, la firma Buquebus fue intimada a sacar el barco de Argentina, motivo por el que fue movido a Uruguay.

En la web, por entonces Buquebus indicaba que el Eladia Isabel era el barco que “más conoce las aguas del Río de la Plata”. “Lleva más de 16 años transportando pasajeros entre Argentina y Uruguay. Los distintos cambios realizados en el buque lo han convertido en un verdadero crucero. Un barco ideal para los viajes de placer, con solarium, restaurante, juegos y todas las comodidades para que el viaje también sea parte de las vacaciones”, se subrayaba.

En aquel momento, desde la Aduana argentina comentaron a El País que, a pesar de que no se encontraba en operación, el buque debía contar con certificaciones y habilitaciones. “No podés dejar un barco varado. Tenés que tener los certificados al día y si no sacarlo del país”, se apuntó.