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Kim Kardashian protagonizó un escándalo por su presencia en el MET Gala 2022, tras desfilar por la alfombra con el vestido original que Marilyn Monroe usó en 1962 para cantar “Happy Brithday, Mr. President” al entonces mandatario de los Estados Unidos, John F. Kennedy. 

Cuando se supo qué vestido traía puesto, el Consejo Internacional de Museos reprobó que la franquicia “Ripley’s Belive It or Not!”, dueña de la pieza tras adquirirla en una subasta en 2016 por US$ 4,8 millones, prestara una prenda de importante valor histórico.

De hecho, la controversia escaló a grandes dimensiones cuando se difundieron supuestamente fotografías del vestido después de que Kim lo usara y en las que claramente podía apreciarse el daño hecho al tejido de la tela, en los brillantes que trae bordados y hasta en el cierre de la espalda. 

No obstante, la empresa que es propietaria del vestido aclaró que Kim no dañó el vestido y que las fotos que se circulaban en redes sociales no eran actuales. Incluso se especificó que la empresaria adelgazó varios kilos para vestir esta emblemática pieza de colección de la moda internacional.

Ahora, con la distancia que da el tiempo, Kim dio su primera entrevista y habló del asunto en el programa “Today”, que conducen Savannah Guthrie y Hoda Kotb. Y recordó que bajó 7,2 kilos para poder usar el icónico vestido. “Lo vi como un papel y realmente quería usarlo. Fue muy importante para mí”, dijo Kardashian de 41 años de edad.

A pesar de que cumplió su objetivo, ella siguió un régimen alimenticio y ha logrado bajar más de peso. “Desde entonces, después, seguí comiendo muy saludable. Ahora he bajado 9,5 kilos. No estoy tratando de perder más peso, pero tengo más energía que nunca. Eliminé tanta azúcar, mucha comida chatarra, como alimentos fritos. Y simplemente cambié por completo mi estilo de vida. Es realidad me enseñó mucho sobre mi estilo de vida y mi salud”, contó la empresaria.