INVESTIGACIÓN

La fiscalGabriela Fossati interrogó a la exsecretaria privada del expresidente de la República, José Mujica, María Minacapilli, por enviar al Ministerio del Interior una nota conteniendo una carta del gestor ruso Alexey S. que solicitaba una cédula de identidad para un compatriota suyo.

Alexey S. es uno de los formalizados por el juez Alejandro Asteggiante Blanco por los delitos de falsificación de documentos públicos y asociación para delinquir. Además del gestor ruso, también fueron imputados por los mismos ilícitos el escribano Álvaro F. y el exjefe de la custodia presidencial, Alejandro Astesiano.

En la nota enviada al Ministerio del Interior firmada por la entonces secretaria privada de Mujica, se pedía a la cartera “un breve informe de lo actuado” con el trámite del ciudadano caucásico en oficinas de la Dirección de Identificación Civil ocurrida en 2013.

En una audiencia realizada a mediados de octubre de este año, Fossati explicó a Minacapilli que la Fiscalía realiza una investigación por falsificación de documentos extranjeros por parte de rusos y ucranianos, y agregó que “se está revisando expediente por expediente” de la Dirección de Identificación Civil. “A partir de ahí se encontró un expediente por el cual una persona de origen ruso intentó sacar una cédula uruguaya. Posteriormente, se presentó Alexey S. quien envió una misiva al presidente Mujica”, explicó la fiscal.

Minacapilli, quien declaró como testigo aunque contó con el asesoramiento legal del abogado y exsecretario de la Presidencia de Mujica, Homero Guerrero, explicó que la carta de Alexey S. llegó al entonces mandatario desde el exterior. “A todos los presidentes del país les llega una gran cantidad de notas con pedidos”, dijo.

Fiscal: En este caso era una carta de una persona rusa (Alexey S.) haciendo una gestión para un conciudadano ruso. ¿Eso era común?

Minacapilli: La persona rusa quería venir a Uruguay. Planteó dificultades para acceder a documentos uruguayos. La madre del señor era rusa y el padre uruguayo. Nosotros, leyendo eso (la carta), ¿qué profundidad podíamos tener en conocimiento de esas personas? Por eso (la carta de Alexey S.) la mandamos al Ministerio del Interior. Ellos debían resolver y luego informar a Presidencia.

Fiscal: ¿Por qué no derivaron la carta directamente al Ministerio del Interior e hicieron que el ciudadano ruso concurriera a la oficina correspondiente? ¿Por qué se hacían esas notas?

Minacapilli: La correspondencia que recibía el presidente era parte de nuestro trabajo. Cuando el presidente Mujica salía de recorrida, los compañeros de seguridad nos traían un montoncito de cartas para que nosotros las canalicemos (a ministerios y entes públicos, entre otros). ¿Para qué lo hacíamos? Así quedaba una referencia en la secretaria privada de Presidencia que después nos permitía hacer un seguimiento de esa nota.

Fiscal: Lo que me cuesta comprender es por qué no derivaban la carta y pedían una devolución al ministerio correspondiente mediante una nota. ¿No era más práctico enviar la carta del ciudadano directamente al ministerio?

Minacapilli: Las administraciones anteriores hacían lo mismo.

Fiscal: Si llega a un ministerio una nota de Presidencia de la República, no es cualquier cosa.

Minacapilli: ¿Por qué?

Fiscal: El trabajo de la institucionalidad es otro. Se presenta la carta (en el organismo correspondiente), se tramita y se resuelve. ¿Por qué no evaluaron la mala interpretación que podía hacer el organismo que recibía la nota de Presidencia? Este puede interpretar que se realice lo que dice la nota.

Minacapilli: En absoluto.

Fiscal: ¿Por qué lo hacían? Ayúdeme a entenderlo.

Minacapilli: Yo trabajé en el Ministerio de Ganadería con Mujica y recibía notas del presidente (Tabaré) Vázquez de la misma forma. No lo veíamos como presiones o pedidos.

Fiscal: ¿Ustedes chequeaban la identidad de las personas que hacían planteos como este (del gestor ruso)?

Minacapilli: No. Es imposible.

Fiscal: Y si es imposible, ¿no es riesgoso remitir una nota a un ministerio en nombre del presidente de la República para que se considere el trámite?

Minacapilli: Se hacía en acuerdo con el presidente Mujica sobre cómo canalizar las notas de Presidencia. Él dijo: “Hagan una nota y pidan al ministerio que llame a la persona que envió la carta”. Si era un tema de salud, la nota de Presidencia iba dirigida al Ministerio de Salud Pública.

Fiscal: Pero este no es un tema de salud. Se trata de ciudadanos rusos que quieren sacar una ciudadanía uruguaya. No es comparable.

Minacapilli: ¿Y qué piden los rusos en la carta, señora fiscal?

Fiscal: Qué tenían dificultades para obtener la documentación uruguaya.

Minacapilli: ¿Qué hacíamos nosotros? Mandábamos una nota al Ministerio del Interior y que ellos la vieran.

Fiscal: ¿Y a usted le parece que Presidencia de la República tiene que hacer algo con las cartas que recibe?

Minacapilli: Con temas como salud y vivienda creo que sí. Le puedo asegurar que las falsificaciones de documentos no arrancaron ahí.

Fiscal: Le puedo asegurar que empezó en 2013. Y lo que me llama la atención es la ligereza con la cual se remite una nota a un ministerio por parte de Presidencia de la República.

En ese momento, Guerrero intercedió y dijo: “A Presidencia llegaban miles de cartas de personas. Mujica instaló un sistema porque no le gustaba que ninguna carta quedara sin contestar”. Y agregó: “Las notas de Presidencia a los ministerios con las cartas eran informales. Los ministros eran personas de extrema confianza del presidente. No se creó ningún expediente con la carta del ciudadano ruso ni se agilizó un documento. Esa carta ni la vio Mujica. Dijo: ‘manden esto al Ministerio del Interior’”.

La carta dirigida al entonces presidente de la República, José Mujica, fue firmada el 27 de diciembre de 2013 por el gestor ruso Alexey S., hoy en prisión preventiva. La misiva señaló: “Somos ciudadanos rusos con muchos familiares en Rusia. En mi caso particular estoy radicado en Uruguay con toda mi familia (mi esposa y dos hijos) menores desde hace cuatro años. Mantengo los vínculos con amigos y conocidos de Rusia y, además de tener inversiones en el país, ayudo a mis coterráneos cuando deciden viajar a Uruguay”.

Alexey S. dijo a Mujica que conoció a muchos uruguayos desde la época de la URSS y también fue contactado por rusos hijos no reconocidos de uruguayos que estarían dispuestos a viajar a Uruguay y formar sus familias en este país. “Desde antes que asumiera el gobierno militar uruguayo, muchos uruguayos viajaron a la URSS y también muchos se quedaron a vivir allí hasta la caída del régimen” castrense, recordó el gestor en la misiva.

Relató que su amigo K.L. es el fruto de una relación de una ciudadana rusa con un uruguayo y agregó que al nacer este se inscribió como hijo de un ruso porque “estaba muy mal visto” en aquellos tiempos para una mujer tener un hijo de padre desconocido.

Sostuvo que, al hacerse mayor, su amigo conoció de boca de su madre su verdadera historia y logró contactarse con su padre uruguayo luego de conectarse “conmigo por Internet”. Expresó que K.L. viajó a Uruguay, conoció a su padre y este estaba dispuesto a reconocerlo. Sin embargo, cuando K.L. quiso sacar la cédula de identidad como ciudadano uruguayo le pusieron “muchas trabas” bajo el argumento de que no podía tener dos padres. Al final de la carta, Alexey S. recuerda a Mujica que “en todo momento los gobernantes de la URSS ayudaron a los uruguayos, en especial Leonid Brezhnev. Por los motivos expuestos le solicitamos una entrevista”.