FILTRACIÓN DE INTELIGENCIA
Los legisladores opositores consideraron que el jerarca de Inteligencia comprometió al presidente Lacalle Pou y al ministro de Defensa, Javier García.
Las bancadas de Senadores y Diputados del Frente Amplio solicitaron este miércoles por la tarde la renuncia del director de Secretaría de Inteligencia Estratégica del Estado, Álvaro Garcé, luego de que el martes pasadoel fiscal Gilberto Rodríguez archivara la denuncia que el jerarca había presentado por las filtraciones del plan de Inteligencia Nacional.
El diputado Mariano Tucci fue quien habló en conferencia de prensa y recalcó que la acusación que hizo Garcé contra los legisladores que participaron de la Comisión que hace el seguimiento a Inteligencia es de una “gravedad extrema”.
“Consideramos que la gravedad de esta situación amerita la consideración por parte del Poder Ejecutivo de pedirle la renuncia al doctor Álvaro Garcé, porque llevó a la Justicia Penal a los legisladores de la Comisión que lo controla solo con convicción y no con pruebas”, dijo Tucci.
El legislador remarcó que el Frente Amplio no encuentra antecedentes desde la vuelta de la democracia en 1985 de episodios donde un poder del Estado denuncie a otro.
“Archivada esta causa, mínimamente lo que espera esta bancada y el Parlamento es, mínimo, las disculpas del Ejecutivo y la renuncia del jerarca”, finalizó.
También puntualizó que con su actitud Garcé comprometió al presidente Luis Lacalle Pou y al ministro de Defensa, Javier García.
Ambas autoridades habían criticado la filtración y habían adjetivado el episodio de “sabotaje” y “traición a la patria”.
“Claramente es un sabotaje a la seguridad nacional, es claramente -como no sé quién es puedo expresarme tranquilamente- alguien al que no le importa el país, que midió un costo político menor o personal menor y perjudica al país”, dijo el mandatario en rueda de prensa el pasado 4 de noviembre.
“Yo no sé (a) quién le cabe en la cabeza, sobre todo si esa persona es un dirigente político o un gobernante”, agregó Lacalle Pou, que insistió: “Se supone que si alguien se dedica a la política es porque tiene vocación de servicio, y si tiene vocación de servicio es porque quiere al país. Que haga un sabotaje de este tipo, no parece lógico”.
El archivo de la causa había generado malestar en filas oficialistas, por entender que el jerarca no había manejado bien la situación.