TRIBUNAL DE HONOR

Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos accedieron en las últimas horas y difundieron ayer nuevas actas militares, entre ellas la declaración de puño y letra del coronel Gilberto Vázquez ante el Tribunal de Honor de Alzada en el que confiesa otra serie de delitos. “He ejecutado numerosas personas, secuestrado y apremiado en varios países recibiendo por ello felicitaciones de los altos mandos del Ejército durante el proceso y en democracia hasta el año pasado inclusive”. Así cierra su carta, fechada el 3 de setiembre de 2006, en la que expresa su alegato de defensa ante el fallo del Tribunal.

Al recibir estas declaraciones, los generales que integran el Tribunal de Honor de Alzada suspendieron las actuaciones (a diferencia de lo que hizo el primer Tribunal que actuó) y remitieron un oficio al encargado de despacho del Comando General del Ejército, el general Manuel Saavedra, para informarle que por unanimidad entendían que “es de aplicación lo dispuesto en el artículo 77 del Reglamento para los Tribunales de Honor de las Fuerzas Armadas”, que establece que “cuando el Tribunal de Honor intervenga en cualquier asunto en el que exista la presunción de un delito, común o militar, su presidente comunicará de inmediato al superior que corresponda suspendiendo las actuaciones del Tribunal, hasta tanto el superior se pronuncie”.

La respuesta de Saavedra llegó el día siguiente, el 7 de setiembre, y dice: “Habiendo sido puesto en conocimiento el señor comandante en jefe del Ejército teniente general don Carlos A. Díaz de los antecedentes por usted elevados (...) el mismo dispuso se continúen las actuaciones del Tribunal de Honor para Oficiales Generales, actuando como Tribunal de Honor de Alzada”. Además, agrega que “los delitos que se presumen surgen de las declaraciones del señor coronel en situación de retiro don Gilberto Vázquez, serán comunicados en su oportunidad a la señora ministra de Defensa Nacional, doctora doña Azucena Berrutti, para dar intervención a la Justicia que se entienda corresponda”.

Queda comprobado así que el comandante en jefe del Ejército conocía las declaraciones de los delitos. La cuestión sobre la que no hay consenso es si la ministra también estaba al tanto de estas confesiones. “No lo sabemos”, respondió ayer Ignacio Errandonea, vocero de Madres y Familiares.

El ministro de Defensa, Javier García, sostiene que tanto el entonces presidente Tabaré Vázquez como Berrutti estaban al tanto de “absolutamente todo” lo que contenían esos documentos, si no, no se concibe que hayan homologado los fallos de los Tribunales de Honor. El ministro informó además que la abogada de la cartera, Nelly Méndez, realizó un informe que fue elevado a Berrutti en el que dio cuenta de que los generales habían detenido las actuaciones por el artículo 77 (presunción de un delito) y que habían continuado tras el aval de Saavedra.

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La exministra dijo a El Observador que no recuerda la actuación de este Tribunal de Honor, mientras que el expresidente no se ha pronunciado sobre el tema. Hoy a las 18.30 el exmandatario hablará en una transmisión por redes sociales del Frente Amplio, en el marco del ciclo “Pueblo a pueblo”.

Por su parte, Nilo Patiño, otro de los referentes de Madres y Familiares, defendió ayer en la conferencia de prensa el papel que desempeñó Berrutti. “La ministra tiene cosas que aclarar acá y que nosotros no vamos a aclarar porque no sabemos cómo fueron”, dijo Patiño, y agregó: “Pero sí sabemos que fue la única ministra de Defensa en período de democracia que tuvo una actitud activa en estas causas; fue abogada de presos políticos, defendía a cualquiera, y en democracia, siendo ministra, por primera vez incauta un documento militar con determinadas implicancias sobre derechos humanos”.