El Banco Central bajo la lupa del FMI: ¿qué dijo el organismo?

EVALUACIÓN

La misión encontró que “las prácticas de transparencia del BCU se ajustan en gran medida a algunas dimensiones”, ya que “la información se difunde a través de varios canales y la puntualidad de las divulgaciones es consistente con la periodicidad de los estándares de comunicación publicados”.

“Sin embargo, en relación con los criterios descritos en el Código de Transparencia Banconcentralista del FMI, hay espacio para mejorar la calidad de la transparencia para abordar las brechas en algunas áreas importantes relevantes para apoyar la autonomía institucional y la rendición de cuentas”, advirtió el organismo.

La misión “proporcionó recomendaciones que dan puntos focales de alto nivel para mejorar las prácticas de transparencia en el BCU. Aún así, es competencia del BCU evaluar la secuencia e intensidad de los cambios en las prácticas de transparencia”, indicó el informe.

¿Qué dijo entonces el FMI sobre la transparencia en lo financiero, monetario, cambiario y más del BCU?

“El BCU tiene un fuerte compromiso con la transparencia, que se materializa a través de una política de comunicación bien articulada y estructurada que incluye herramientas integrales”, señaló el reporte.

“La calidad y cantidad de la información disponible son satisfactorias, pero los métodos de búsqueda en el sitio web pueden restringir el acceso a la información y podrían mejorarse para localizar la información más fácilmente”, advirtió el FMI.

Según el Fondo, “a lo largo de los años, y cada vez más en el período más reciente, las prácticas de transparencia del BCU en materia de política monetaria han considerado estas condiciones económicas y financieras específicas (dolarización elevada, mercado de cambios pequeño y concentrado, inercia inflacionaria, entre otros) en las comunicaciones con los grupos de interés”.

La misión evaluó que “las prácticas de transparencia con respecto a las intervenciones cambiarias brindan a las partes interesadas relevantes (en su mayoría instituciones financieras activas en el mercado cambiario nacional, pero también al público en general) amplia información sobre los resultados de las acciones del BCU”.

“Sin embargo, sería útil una mayor divulgación de los efectos de la intervención dada la microestructura actual del mercado cambiario uruguayo que se caracteriza por un número limitado de participantes y la concentración de transacciones, un mercado cambiario concentrado con pocas transacciones”, aconsejó el FMI.

“La transparencia sobre la intervención cambiaria para el público en general mejoraría con una descripción genérica en el sitio web del BCU de la justificación de la elección de los diversos instrumentos que pueden utilizarse, así como explicaciones genéricas sobre la justificación de la intervención cambiaria”, aseguró.

El BCU publica habitualmente si intervino o no en el mercado cambiario, pero nunca hay una justificiación de esas decisiones.

Sobre la autonomía financiera, el FMI recordó que está establecida en el marco legal, pero “el BCU no explica la justificación y las medidas para salvaguardarla”.

En ese sentido, “la transparencia podría mejorarse explicando el fundamento de la autonomía financiera del BCU y las herramientas para implementar las disposiciones relacionadas de la Carta Orgánica del BCU. Asimismo, las revelaciones sobre cómo se resguardan estos recursos de los riesgos inherentes a las actividades del BCU y los mecanismos de rendición de cuentas que aseguren el control de su uso efectivo serían información complementaria relevante para sustentar la autonomía”, recomendó el informe.

“De manera similar, una mayor divulgación de las exposiciones al riesgo y la gestión de estos riesgos mejoraría la rendición de cuentas”, sugirió.

“La transparencia del BCU en la gestión de riesgos consiste principalmente en la divulgación en los estados financieros de los riesgos derivados de la gestión de las reservas de divisas. Por el contrario, las divulgaciones sobre la gobernanza general del riesgo y la gestión del riesgo operativo son limitadas”, advirtió el FMI.

“Específicamente, las publicaciones del BCU carecen de una visión institucional de las prácticas de riesgo y los arreglos de gobierno corporativo del banco”, cuestionó.

Según el Fondo, el BCU “juega un papel clave en la salvaguarda de la integridad financiera; sin embargo, la información específica sobre sus políticas y procesos relacionados con la supervisión de combate al lavado de activos y financiamiento del terrorismo es limitada”.

“El BCU divulga información general sobre sus políticas, facultades y procesos de supervisión” en la matera. “Sin embargo, no se encuentra disponible públicamente más información sobre cómo evalúa los riesgos de lavado y de sus instituciones supervisadas, cómo define sus políticas de supervisión y sobre los recursos internos asignados a estas actividades”, criticó el Fondo.