EL AD10S
En 1996 Diego volvió a jugar en Uruguay por solidaridad. "Le quedamos agradecidos de por vida por su humildad", dijo papá Pablo.
Diego Maradona volvió a Uruguay en diciembre de 1996 para jugar en el estadio Centenario con el fin de colaborar con Alejandra Forlán. Esa noche unas 50.000 personas se hicieron presentes en el partido a beneficio de quien unos años antes había tenido un accidente automovilístico y debía realizar un tratamiento.
Se enfrentaron una selección de jugadores de Nacional y Peñarol contra otra de futbolistas del resto de América, donde jugó Maradona.
A Pablo Forlán también le embargaba ayer una enorme tristeza por la partida de Maradona. Él y su familia le estarán siempre agradecidos por su desinteresada colaboración con Alejandra.
Su participación en el partido fue posible gracias a Daniel Bolotnicoff, quien fuera primero el abogado y luego representante de Maradona y también años después de Diego Forlán.
Pero en realidad, unos años antes, el 10 había estado preparándose en Uruguay para las Eliminatorias del Mundial de 1994 y entrenaba en unas canchas de fútbol 5 que tenía Pablo Forlán cerca de los lagos del aeropuerto.
“Me acuerdo que un día, tomando un refresco en las canchas, me preguntó cómo lo veía. Y me contó que la selección estaba complicada para clasificar al Mundial de Estados Unidos, que tenían que jugar dos partidos en el repechaje con Australia y que lo iban a llamar. Yo le pregunté qué estaba esperando, que fuera, que estaba impecable. Y clasificaron. Después pasó lo que pasó en el Mundial, pero con él en la cancha Argentina estaba para pelear el título. El equipo sintió lo que pasó, fue un baldazo de agua fría”, contó Pablo Forlán.
“Por eso ya teníamos esa relación y le pedimos que viniera a jugar aquel partido. Se prestó enseguida. Vino con Daniel (Bolotnicoff) e hizo algo muy lindo. Yo lo fui a buscar al aeropuerto y lo llevé al hotel. En la entrada lo estaban esperando todos los periodistas y las cámaras y dijo que esperaba que la gente del pueblo uruguayo acompañara en el partido. Le quedamos agradecidos de por vida por su humildad y su manera de ser aquella noche. Es más, ayer Alejandra subió la foto de ella con Diego en aquel partido”, agregó Pablo, quien no lo compara con Pelé. “Fue un fenómeno. No lo comparo, tanto él como Pelé fueron los mejores, en diferentes épocas y diferentes fútbol. Tenemos que estar agradecidos de haber visto a dos tremendos jugadores”.
Pablo no volvió a verlo, pero su hijo Diego se cruzó varias veces con Maradona que iba a ver a Agüero o en los eventos de FIFA. “Siempre le preguntaba cómo andaba el viejo y me mandaba un abrazo”.