TRICOLORES
El entrenador necesita encontrar soluciones rápidas a los problemas que acusa Nacional, muchos de los cuales le hicieron perder el tricampeonato.
Nacional, que había amagado con tener posibilidades de entregar mejores rendimientos que aquellos que tiraron por la ventana la posibilidad de ser tricampeón uruguayo, volvió a entregar las mismas sensaciones de ser un equipo con muchos problemas.
Despistado, por momentos. Carente de una fuerte pegada, en otros. Y hasta llamativamente endeble, como supo serlo una tarde en Belvedere, cuando se le esfumó una chance de ir por el título, en el cuidado de su última zona. En este caso, en su compromiso ante Deportivo Maldonado, se llega a un alto grado de debilidad en el fondo porque el equipo visitante prácticamente no atacó e igualmente pudo meterle tres goles.
Por ello a Pablo Repetto le espera un gran trabajo por delante porque tiene que atacar varios problemas a la vez. Porque de nada sirve manejar el partido o la pelota si no se es punzante arriba y si no se es seguro en el fondo.
Hay cuestiones, además, que se repiten y que incluso debieron ser atacadas antes de este compromiso, como la reiterada improductividad ofensiva de Alfonso Trezza o las repetidas fallas que tiene la dupla de zagueros conformada por Laborda-Marichal. O la escasez de pases filtrados y profundos para aprovechamiento de sus atacantes. Y, si se quiere, hasta la falta de agresividad en la mitad del terreno para adueñarse del eje central.
Repetto va a tener que meter mano. Rápido. Porque a este equipo en construcción solamente lo pueden ir elevando hacia arriba los buenos rendimientos individuales, que son los que forjan luego el trabajo colectivo.
Futbolistas a los cuales recurrir tiene, será cuestión de que se muestren y rindan.
1) El problema del fondo
En la zaga fallan feo. El entrenador dejó en claro que les tiene confianza, pero la dupla de Laborda y Marichal sigue cometiendo errores grandes y ellos cuestan goles.
Lo puede mejorar con otro zaguero o un volante más retrasado. Es sencillo: o juega con un volante tapón que se quede con los zagueros o juega otro futbolista que no tenga esos vaivenes tan marcados y que terminan teniendo un costo alto.
2) El doble cinco
Pierde bastante y por eso está en el debe. Diego Rodríguez y Felipe Carballo no consiguen consolidarse como una buena dupla. Pierden más de lo que ganan en el medio. Por momentos falta agresividad en la contención.
Tiene variantes. Una opción es jugar distinto, la otra cambios. Puede entrar Yonathan Rodríguez por el “Torito” Rodríguez o cambiar la figura del equipo.
3) Faltan pases filtrados
Sin pegada. Nacional no pudo dañar. Hubo mucho toque corto, incluso cerca del área rival y escasa habilitación para los piques del “Colo” Ramírez. ¿Y los remates al arco?
Una decisión importante es ir por otro armador del juego. Es claro que Leandro Otormín no arrancó bien en el Apertura. Manuel Monzeglio se muestra más audaz porque intenta y realiza habilitaciones punzantes.
4) Ataque sin mucho poder
Faltan los piques y las buenas habilitaciones porque Alfonso Trezza no anda como delantero, no convierte y no asiste bien. Hace un desgaste enorme corriendo y marcando, pero no daña atacando. Al equipo le urge tener desborde y buenas habilitaciones.
Los extremos son clave. Un opción es cambiar las dos bandas. Brian Ocampo a la derecha para desbordar y mandar la pelota al área. Puede formar una gran dupla con el "Pumita" Rodríguez. Y no olvidar que Nacional ahora tiene dos 9 goleadores que necesitan recibir juego desde los costados.