CONMEBOL

Con la clasificación de Athletico Paranaense a semifinales de la Copa Sudamericana, Peñarol ya conoce su rival y no solo eso; también sabe que definirá la serie de visitante y sobre césped sintético ante un equipo con el cual no tiene buenos registros.

En la semana del 21 de septiembre el aurinegro será local en el Campeón del Siglo en el partido de ida, mientras que en la semana siguiente viajará a Curitiba para jugar en el Joaquim Américo Guimarães (más conocido como Arena da Baixada) y decidir allí el pasaje a la definición del torneo continental.

El antecedente más cercano entre ambos clubes es reciente, pues el 3 de marzo del año pasado chocaron precisamente en el escenario del Paranaense en el debut de ambos en la Copa Libertadores. Fue, además, el bautismo internacional de Diego Forlán como entrenador. Ese día Peñarol perdió 1-0 y tuvo como figura a Kevin Dawson, quien evitó la goleada.

Una de las problemáticas de Peñarol fue precisamente la adaptación al campo de juego, la que de hecho no consiguió. Los futbolistas corrieron sistemáticamente detrás de la pelota, que corrió muy rápido y eso le impidió estar bien parado a la hora de defenderse y contraatacar.

Del plantel de Peñarol que jugó aquel partido solo quedan cuatro futbolistas: Kevin Dawson, Giovanni González, Gary Kagelmacher y Jesús Trindade. Quizás el juego que despliega Peñarol actualmente, con tenencia de pelota y circulación rápida de la misma, pueda ayudar a que esta vez el equipo no sienta tanto el efecto del campo de juego.

Peñarol ha enfrentado en cuatro ocasiones a Athletico Paranaense y el saldo es negativo: 1 victoria y 3 derrotas, con 4 goles convertidos y 9 recibidos. Fueron 2 enfrentamientos por Copa Libertadores (en este certamen logró el único triunfo, por 3-2 en el CDS) y otros tantos por Copa Sudamericana, en los cuales cayó 4-1 de local y 2-0 de visitante en la edición 2018.