ESPAÑA
Si un club pide el transfer, la jurisprudencia es en torno a que prima el derecho laboral del jugador a poder ejercer sus funciones.
Leonel Messi puede llegar a abandonar al FC Barcelona sin la necesidad de tener que afrontar los 700 millones de euros de la cláusula de rescisión de contrato que pretende hacer valer el club. Juega a favor del futbolista argentino la jurisprudencia existente en FIFA y en el Tribunal de Arbitraje (TAS).
Según las normativas vigentes los clubes están obligados a conceder el transfer a un futbolista en el momento que un club solicite su fichaje. O sea, si alguno de los clubes que han puesto los ojos en el Messi solicita a FIFA el transfer internacional de Leo Messi, este tendrá que concederlo para que pueda jugar en cualquiera de estos clubes.
El diario deportivo Sport explicó que "la jurisprudencia es en torno a que prima el derecho laboral del jugador a poder ejercer sus funciones".
La acción de un club en este sentido puede generarse de forma paralela a la comunicación que haga el futbolista argentino a través de una carta en la que comunique que decidió romper el contrato de manera unilateral.
En caso de no llegar a un acuerdo las partes, se dará paso a la justicia ordinaria. Obviamente en los juzgados de Barcelona donde tienen firmados sus contratos la entidad azulgrana. Y allí tendrá que ser un juez quien determine si la cláusula de liberatoria a la que se acoge Messi es válida o por el contrario el jugador deberá abonar los 700 millones de euros o parte de ello de su cláusula.