COPA DEL MUNDO

Lionel Messi, que este martes está jugando su partido número 196 con la selección argentina, alcanzó un récord histórico: con su gol de penal, al minuto 34 ante Croacia, llegó a 11 goles en Mundiales y se convirtió en el máximo goleador histórico de su país en estos torneos.

El récord era de Gabriel Omar Batistuta, que sumó 10 entre las Copas del Mundo de 1994, 1998 y 2022.

El 10 de Argentina, además, anotó su tanto número 96 en la albiceleste y estiró su ventaja como máximo artillero. A nivel de selecciones, solo lo superan en el mundo actualmente el iraní Ali Daei (retirado), con 109, y el portugués Cristiano Ronaldo, con 118.

La otra racha que generó con su penal de este martes fue la de convertir en tres fases eliminatorias consecutivas del Mundial de Qatar 2022 (octavos de final, cuartos de final y semifinales) cuando antes, en los Mundiales de Alemania, Sudáfrica, Brasil y Rusia, nunca había podido anotar en instancias de eliminación directa. De hecho, también es el primer jugador albiceleste que lo consigue.

Como añadido, los registros marcan que el argentino igualó al alemán Lothar Matthäus como el jugador con más partidos en la historia de los Mundiales, con 25 cada uno y que, con el pase de gol para Julián Álvarez, alcanzó los 20 goles producidos en Mundiales (11 goles y 9 asistencias).