MI OPINIÓN

Con la industria del automóvil encaminándose a pasos agigantados hacia la electrificación, ¿existen posibilidades para considerar otros tipos de combustible? Recientemente, Porsche ha anunciado que estará invirtiendo 24 millones de dólares en una planta con el fin de producir combustible sintético para sus motores a combustión interna.

Es el primer fabricante en hacerlo, y de hecho, no parece una mala idea. La planta se encuentra ubicada en Chile, y la producción anual inicial será de 55 millones de litros, elevándose a 500 millones de litros para el 2026.

Porsche será en principio, su único cliente, y utilizará el combustible sintético en sus eventos “Porsche Driving Experience” y en sus autos que compiten en diferentes campeonatos alemanes. De todos modos, los planes de Porsche para la electrificación continúan incambiados, ya que junto con el anuncio de la planta en Chile, también se puso en conocimiento sobre una inversión de 70 millones de dólares en Rimac-Automobili, el especialista croata en vehículos eléctricos de alta performance, aumentando su participación de un 15% al 24%.

Por las dudas, Porsche juega en las dos canchas.