ENTREVISTA
Benjamín Vicuña, Paola Krum, Luciano Castro, Mercedes Funes, Damián de Santo y Jorgelina Aruzzi protagonizan la telenovela que llega este lunes a Paramount+ y Telefe
Hoy se estrena El primero de nosotros, la ficción que protagonizan Benjamín Vicuña, Paola Krum, Luciano Castro, Damián de Santo, Mercedes Funes y Jorgelina Aruzzi, y que, como el elenco lo refleja, es una de las grandes apuestas de la ficción televisiva argentina del año. Se la verá en Telefé (disponible en los servicios de televisión para abonados) pero además llegará directo al streaming, de la mano de Paramount+.
En la jornada del Foro Paramount+ realizado el pasado lunes en Buenos Aires, los actores brindaron una conferencia de prensa en la que dieron detalles del lanzamiento. El País estuvo ahí.
En El primero de nosotros, seis amigos se conocen desde siempre y sus vidas cambian cuando a uno de ellos le diagnostican un tumor cerebral con pronóstico poco alentador. Eso que afecta en primera persona a Santiago (Benjamín Vicuña) se revela en el primer episodio, y a partir de ahí todos se replanteará cómo quieren vivir el tiempo que les queda.
Ninguno se quedará de brazos cruzados y hasta el que parecía tener una vida ordenada y feliz se animará a lo distinto.
Santiago, que es psicólogo y runner, retomará un vínculo perdido con una hija adolescente y también se dará cuenta de que tiene un pendiente desde joven con Jimena (Krum). Esa no será la única historia de amor que se contará en la tira; rondará los 60 episodios.
En conferencia, Luciano Castro adelanta que su personaje, el millonario y mujeriego Nicolás, “evolucionará”. “A nivel personal cambia y busca lo que nunca quiso”, señala a modo de ejemplo de esta línea de transformaciones.
“Está bueno ver otros estereotipos de hombre”, agrega Jorgelina Aruzzi, que acá interpreta a Valeria. “Y ahora también estamos viendo otro tipo de mujer”, dice.
“Es aprender cómo hacer estos cambios y ponerlos en la ficción de manera natural. Todo es un aprendizaje, todo cambió, la forma de ver la televisión, el teatro; nos estamos modificando completamente y está bueno que eso se plasme en los guiones y la ficción porque así se siembra. Yo crecí con Amo y señor”, señala Aruzzi en referencia a aquella telenovela de los ochenta en la que Arnaldo André era el recio que se interesaba por Luisa Kuliok, “y está bueno poder mostrar otro tipo de cosas”.
En el caso de Soledad e Ignacio, los que parecían tener la vida más ordenada y plena del grupo, el diagnóstico de Santiago también los obligará a ciertos replanteos. Allí están Mercedes Funes y Damián De Santo.
“Soledad, que nunca se preguntó demasiadas cosas, empieza a interpelarse, y el camino que ella va a transitar es divertido”, comenta Funes. “Se cree que cuando uno hace transformaciones en la vida son existenciales y profundas, y en ella son hasta tontas, pero no por eso dejan de ser transformaciones. Por ejemplo, aprender a manejar, preguntarse si se siente bien, femenina y gozosa de su sexualidad”, son parte del camino.
“Soledad empieza a no estar tan sola”, bromea De Santo. “También cambia la visión que uno tenía del otro de toda una vida, empieza a cambiar de adentro hacia afuera, y se nota en el exterior. Tal vez sea una excusa esta historia para que todos entremos en ese juego, y de ahí el leitmotiv. Me parece que no es la enfermedad el centro, sino la vida”, analiza.
Cómo fue trabajar en pandemia
El primero de nosotros es una de las primeras telenovelas filmadas en Argentina desde el inicio de la pandemia. “En ese contexto nos llega esta historia que tiene un capital humano: hablar sobre la vida, la muerte, las amistades, los vínculos, y estamos muy orgullosos, porque quedó muy bien”, comenta Vicuña al respecto.
“Creo que hubo mucha valentía por parte de los productores de este proyecto. No solo encarar una ficción en medio de la pandemia, porque corríamos el riesgo de que se suspendiera todo el tiempo. También por la valentía de contar esta historia y este tema. Y contarlo de una manera que produzca real empatía y no distanciamiento”, añade Paola Krum.
Y si bien se le dice “telenovela”, los actores entienden que El primero de nosotros es más una “súperserie” que una tira corriente. Una de las diferencias podría estar en su extensión, ya que aquí serán casi 60 capítulos. Esa duración, aseguran, es responsable de que el relato vaya a lo humano y no se quede en el morbo.
Pese a la consigna dramática y pensando en ese contexto en el que todo se dio, la actriz afirma que igual hubo espacio para colar el humor.
El humor aparece, de hecho, cuando hablan de cómo fue filmar en tiempos pandémicos, “Nos hisopábamos tres veces por semana, pero cada vez que teníamos una escena de beso nos teníamos que hisopar igual, entonces eran cuatro veces por semana”, cuenta Castro. Entre risas, Aruzzi confiesa: “Yo pedí no besarlo más”.
Pero a pesar de los cuidados y las dificultades que agregó el covid a la dinámica laborar, el grupo entiende que la pandemia permitió valorar la ficción. “A veces me quejo de estar mucho en el canal, pero el canal es mi vida, los actores son mis amigos”, señala Aruzzi. “Hay que valorar el trabajo que uno hace cuando lo ama. A mí la pandemia me trajo eso: ganas de salir a laburar, que se termine todo, que la gente vuelva al cine, al teatro. Es un deseo constante”.
Castro, por su parte, reconoce que la pasó fatal por todos aquellos colegas que no pudieron trabajar. “Se formó un embudo que era angustiante. Sabías que pegabas un laburo y no te daba ni ganas de festejarlo, porque te dabas vuelta y tenías a 40 compañeros que se estaban muriendo de hambre”, recuerda. “Fue una mierda, pero la pasión por hacer lo que te gusta no tiene precio”.
Esa pasión buscaron volcar en El primero de nosotros, una historia sobre la vida que, a la vez, revitaliza el tradicional género de la telenovela, que ahora ya no se limita al mundo de la televisión.
¿Quién es quién en "El primero de nosotros"?
Benjamín Vicuña: “Mi personaje es Santiago, psicólogo y runner. Está la idea de la carrera como una maratón de la vida, y creo que es un personaje especial. Aparentemente tiene buenas herramientas para superar una noticia así de devastadora, porque en el primer capítulo le dan un pronóstico de vida limitado”.
Paola Krum: “Mi personaje, Jimena, se replantea todo. Eso un poco nos pasa a todos con estas cosas dramáticas. A ella le pasa que de repente se despierta y encuentra que tiene pendiente el amor”.
Jorgelina Aruzzi: “Mi personaje es Valeria, una mujer independiente que lucha por seguir así. Se la banca sola y la noticia de su amigo hace que se acelere su deseo de ser mamá. Ella se resguarda mucho del amor, y con su mejor amigo se empiezan a dar cuenta de que pasa algo entre ellos. El vínculo con Luciano fue divino; teníamos buen diálogo y feeling”.
Luciano Castro: “Soy Nicolás, el mejor amigo de Santiago. Soy huérfano desde chico, millonario desde chiquito y un poco el hermanastro de él toda la vida. Y me doy cuenta del amor que tengo por mi amiga de toda la vida. Mi personaje dice que es su amiga para no comprometerse con nadie”.
Mercedes Funes: “Soledad es una mujer muy sencilla con su vida tranquila. Tiene un hijo y su marido es su novio de toda la vida. A través de esta situación que le pasa a Santiago, hay un replanteo que se hacen todos respecto a la vida que quieren vivir”.
Damián De Santo: “Ignacio, mi personaje, toma consciencia de la vida desde otro lugar. Esta historia de la vida lo lleva a un deseo interno que tenía escondido. Su camino es el de disfrutar de ese cambio”.