SALUD
Está todo dado para instalar un sistema de este tipo en el sector público en el que los pacientes entran en la mañana, se los opera y se van de alta en el mismo día.
"Hay una tendencia en el mundo hacia la cirugía ambulatoria”, planteó el profesor de Anestesia Grado 5 de la Facultad de Medicina de la Universidad de la República (Udelar), Juan Riva, quien integra un grupo de profesionales del Hospital de Clínicas que impulsa la creación de una Unidad de Cirugía Ambulatoria.
“Dependiendo de la complejidad de los hospitales, entre un 40% y un 60% de las intervenciones quirúrgicas se podrían hacer en un régimen ambulatorio. De esa manera optimizás los recursos, además de que muchos pacientes lo prefieren porque tienen más rápida reinserción laboral”, agregó el anestesista.
La idea existe desde hace muchos años, desde la época en que se planteó la refuncionalización del Hospital de Clínicas.
“Lo presentamos incluso como proyecto arquitectónico. Servicios del subsector privado han tomado buena parte de la propuesta para llevarla adelante, lo cual es un orgullo para nosotros”, afirmó.
Problemas, que el profesional identificó con falta de una buena gestión para acercar a las partes involucradas, han determinado que hasta el momento no exista una experiencia de este tipo en el sector público, una de las principales razones por la que intentan llevarla adelante junto a la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE).
“El proyecto tiene dos patas: por un lado, los servicios ambulatorios forman parte del avance de la medicina moderna y, por otro, son un recurso para bajar la lista de espera”, destacó. Esto último cobró especial importancia en el último año y medio por los atrasos de las intervenciones quirúrgicas que provocó la pandemia de la COVID-19.
“Tanto ASSE como nosotros nos beneficiaríamos porque es algo que quedaría para el futuro”, agregó sobre una inversión que parece cara al principio, pero que a la larga significa mayor seguridad para el paciente, contar con más espacio y mejores recursos humanos, incluso para las cirugías complejas, y eliminar el rezago que hay respecto al sector privado.
“Tiene que haber uno que arranque con el tema y vaya marcando las pautas, por ejemplo para que luego haya lugares en el interior del país”, acotó Riva.
Beneficios económicos y para los pacientes
La Cirugía Ambulatoria comenzó como una cuestión para mejorar los recursos desde el punto de vista económico, dado que una estadía en un hospital es costosa. Pero con el tiempo se le fueron sumando otros beneficios, el primero de ellos fue la seguridad de los pacientes. “Es en favor del paciente estar el mínimo tiempo posible en el hospital”, señaló el anestesista Juan Riva. Para muchos es más cómodo estar en su casa o se sienten mejor en su entorno familiar; otros lo prefieren por una rápida reinserción laboral.
Por otro lado, apareció la pandemia de la COVID-19, que también favoreció ir hacia un sistema ambulatorio como una forma de optimizar recursos y de bajar la lista de espera generada en este último año y medio. Es una razón de peso para que se cree esta unidad dentro del sistema público, donde aún no se cuenta con servicio ambulatorio.
Cómo funciona.
“En el sector público no hay servicio de Cirugía Ambulatoria, lo que hay son casos particulares de cirujanos que hacen cirugía en el día, pero no es lo mismo”, explicó Riva.
Un servicio implica contar con un equipo asignado a la tarea, integrado fundamentalmente por enfermeros, el anestesista y el cirujano, cualquiera sea la especialidad. Son ellos quienes, sin necesidad de ingresar al paciente o solo con una consulta periférica, detectan si es capaz de ir hacia un procedimiento ambulatorio, sea por sus características o por las características de la cirugía.
Una vez detectado el paciente se define el día de la intervención quirúrgica, la que se realiza en la mañana o en las primeras horas de la tarde. Luego es dirigido a un sector del hospital en el que se simula lo que sería la reinserción a su casa: se viste, está en un sillón, mira televisión, lee, toma agua.
Todo eso se controla y si alcanza un score que marca que está en condiciones de irse a su casa, se va esa misma tarde.
Desde el centro hospitalario se lo sigue monitoreando en forma telefónica con la seguridad de que si hay alguna complicación tendrá acceso inmediato a la consulta o a un sistema de emergencia que lo atienda en su hogar.
“Puede ocurrir que de paciente ambulatorio se transforme en paciente de internación y, en ese caso, estará bien asistido”, aclaró.
El especialista apuntó que este sistema también sirve para aquellos pacientes que están muy graves, incluso en etapas terminales, y para los que sacarlos de su ambiente familiar es malo. Con esto se les pueden practicar procedimientos que antes no se habilitaban por su debilidad, pero que ahora se realizan con tanta seguridad que en el mismo día vuelve a su casa y a su entorno familiar.
La propuesta inicial contemplaba contar con cuatro quirófanos funcionando en simultáneo, pero dado lo costoso que es sostener un bloc quirúrgico se estableció una primera etapa con solo dos quirófanos. “Eso nos permitiría absorber un número importante de cirugías, más o menos 10 por día”, indicó Riva.
Vale aclarar que no cualquier intervención quirúrgica es apta para una Unidad de Cirugía Ambulatoria, “pero en muchos países funciona tan bien que ya es un reclamo de los pacientes y se han ampliado las posibilidades”.
“Antes para operarte de la vesícula por vía laparoscópica estabas dos o tres días internado; hoy ese tipo de cirugía se está planteando hacerla ambulatoria. Han mejorado tanto los resultados y la experticia de los cirujanos y la agresión sobre el paciente es tan limitada, que son muchas las intervenciones que permiten un alta precoz con mucha seguridad”, remarcó.
Uruguay cuenta con personal entrenado
La Unidad de Cirugía Ambulatoria cuenta con personal especialmente asignado, “desde quien recibe al paciente en admisión hasta el equipo médico”, destacó Riva. Lo otro importante es que se requiere experticia para todo porque se opera a un ritmo importante. Se necesita: saber seleccionar al paciente, arreglo y limpieza de la sala de operaciones, organización de los lugares comunes, y entrenamiento de cirujanos y anestesistas.
“Tenemos un grupo grande de cirujanos con un altísimo grado de entrenamiento para las cirugías que se hacen en los servicios ambulatorios. Y en la parte de anestesia, hace años que venimos trabajando en el tema y forma parte de la currícula de la carrera”, señaló el especialista. “Se trata de aplicar una estrategia general que permita que cuando el paciente se vaya de alta esté calmado, sin dolor, sin complicaciones y sin residuos anestésicos que puedan ponerlo en riesgo en su casa”, añadió Riva.
Experiencia en el tema.
“Una de las ventajas que tenemos es que quien dirige el proyecto –Beatriz Noya (Grado 4 de Anestesia)– se ha dedicado al tema desde hace años; incluso hay proyectos fuera del Clínicas que se han basado en el suyo”, destacó Riva sobre quien está al frente de la propuesta, una profesional que ha recorrido varios países para interiorizarse de cómo funciona una unidad de este tipo.
“Tenemos los recursos humanos entrenados; lo que tenemos que hacer ahora es gestionarlos bien porque ocurre que podés tener grupos de salud altamente preparados, pero cuando se juntan funcionan mal, como pasa en un equipo de fútbol. En eso se basa la gestión en salud, en hacer que las piezas funcionen armónicamente. Aceitar eso se logra rápidamente y sin riesgo para el paciente”, concluyó Riva.
Unidad multidisciplinaria de seguimiento del COVID-19
La creación de la Unidad de Cirugía Ambulatoria forma parte de un proyecto mayor denominado Rehabilitación postcovid que el Hospital de Clínicas presentó en la última Rendición de Cuentas. El mismo incluye una Unidad de Seguimiento Post COVID que funciona desde hace algo más de un mes, la que se pretende agrandar y destinarle más recursos.
“Consta de una atención multidisciplinaria en la cual participamos neumólogos, internistas, fisiatras, psicología médica y la parte de estudios. Vemos al paciente en forma integral”, explicó a El País Ana Musetti, profesora agregada del Laboratorio de Función Respiratoria y coordinadora de la parte neumológica de la unidad.
La misma surgió como respuesta al aumento de casos de COVID-19, de manera que los pacientes que fueran dados de alta pudieran contar con un seguimiento telefónico diario de su evolución hasta su alta definitiva, desde el punto de vista epidemiológico o por lo menos clínico sin requerimiento de oxígeno. Al mes se les hace una nueva consulta telefónica y, de acuerdo a su situación, se les otorga una cita presencial y se les coordinan los estudios necesarios (rayos, tomografía, imagen, placas, ecocardiograma, funcional respiratorio).
La idea es que en un mismo día el paciente sea examinado por todos los especialistas y se haga todos los estudios.
Musetti informó que en este mes de seguimiento han notado que la mayoría de los pacientes mejora espontáneamente; los que estuvieron internados con requerimiento de oxígeno han quedado con compromiso respiratorio y caída del oxígeno durante el ejercicio; en algunos han aparecido infecciones porque quedan en estado de inmunodepresión o con secuelas en la parte muscular, y se han registrado muchos casos de ansiedad y depresión.
Propuestas para la Rendición de Cuentas
El Hospital de Clínicas presentó tres proyectos: Seguimiento COVID-19, Rápida Resolución del Cáncer de Mama, y ACV y Neurorrehabilitación.