ASOCIACIÓN

Los niños internados en el Hospital Pereira Rossell cuentan ahora con un nuevo espacio para jugar, divertirse y aprender, ya que ayer, 18 de agosto, se inauguró la Sala Familiar Educativa de la Asociación Casa Ronald McDonald.

Esta sala está ubicada en el quinto piso del hospital y la idea es que los pequeños que estén en sala y tengan permiso de su médico para salir de la habitación puedan tener un espacio para jugar con sus pares, para seguir aprendiendo y dejar de lado por un rato las preocupaciones que puede traer el pasar varios días en un hospital.

Sandra Marcos, directora ejecutiva de la Casa Ronald McDonald, contó al diario El País que se trata de “un proyecto que surge por la necesidad que presenta el hospital de tener un espacio que sea especialmente pensado para que los niños y sus familias tengan un respiro del ámbito hospitalario”.

El cometido del Pereira Rossell es brindar un tratamiento para que los niños se curen, agregó Marcos, y lo que brinda ahora este nuevo espacio es un gran aporte “para cuando los niños que están internados y que pueden salir de la habitación puedan jugar, aprender, estar con otros pequeños”.

Con el permiso de su médico, los niños ahora podrán trasladarse a esta sala sin salir del centro de salud. Está ubicada estratégicamente para que sea accesible a todos, tanto para los que pueden desplazarse por sus propios medios, como para los que deban hacerlo en silla de ruedas.

“Es un espacio especialmente pensado para que los niños y también sus padres tengan un momento de descanso, para que los grandes puedan tomarse un café, bajar el estrés, descansar pero, sobre todo, es un espacio muy importante destinado a que los niños puedan hacer actividades propias de la infancia”, explicó Sandra Marcos.

Por un lado está la parte educativa formal, para que sigan motivados y estudiando y, por otro, la no formal con talleres diversos que se irán brindando para todas las edades. Los habrá de manualidades, de lectura de libros, de títeres, pintura, entre otros.

Ricardo Méndez, presidente de la Asociación Casa Ronald McDonald, sostuvo que se sienten “felices con la apertura de este nuevo proyecto junto al Pereira Rossell que nos permite ayudar a los niños internados y sus familias brindándoles un espacio de aprendizaje y descanso especialmente diseñado para ellos dentro del hospital”. Agregó que este es un “granito de arena” para seguir ayudando a las familias en los momentos que más lo necesitan.

Desde la asociación destacaron el apoyo de las empresas que colaboran para que estas obras puedan realizarse: Fundación ReachingU, banco BBVA, Grupo Disco, SCJohnson “y a todos los que nos brindaron su apoyo para hacer de la Sala Familiar Educativa un sueño hecho realidad”, concluyó Méndez.