VERANO

Tal vez la palabra más asociada a “temporada” de veranoeste año sea “atípica”. Porque sí que lo es. La ausencia de turistas extranjeros, sobre todo de argentinos y brasileños, se hace notar en todas las esquinas del este y en materia de coctelería no es la excepción.

El barman detrás de la barra lo tiene muy claro: el uruguayo es más clásico, mientras el extranjero pide tragos más elaborados. Por eso esta vez, con un público más uruguayo que nunca, los más solicitados son los clásicos, aunque hay un denominador común en casi todos los lugares: las recetas con Aperol.

El Aperol, una bebida centenaria, ya venía pisando fuerte por estos lados desde hace al menos dos veranos, pero esta temporada brilla en todas las cartas: a los clásicos Aperol Sour y Aperol Spritz, los más pedidos, se suman decenas de cócteles de autor. Suelen ser tragos simples, coloridos, refrescantes, livianos. Ideales para quien busca una bebida sin demasiado alcohol.

Es así que si bien los clásicos como el mojito, la caipirinha o las margaritas no faltan, el Aperol es mencionado por cualquier barman con el que se hable.

Dentro de los cócteles más famosos hechos con Aperol están el Aperol Sour y el Aperol Spritz. En cualquiera de los dos casos, la simpleza de unos pocos ingredientes conforma bebidas que resultan con un color naranja fuerte y tienen un toque cítrico, ideal tanto para el día como para la noche.

En el parador Porto 5, ubicado en la parada 5 de la Playa Mansa, tienen por ejemplo al Apero Sour 2.0, que es a base de Aperol, durazno, limón y syrup. Este cóctel de autor está para $ 350.

Otro parador de playa que tiene varias opciones con esta bebida es I´marangatú. Desde su barra, Adrián contó a El País que sigue “la tendencia del Aperol, porque es liviano, refrescante, bajo en alcohol y tenemos varios reversiones de lo que es el Apero Srpitz”.

Tienen, por ejemplo, el Sprit Passion, con Aperol, espumante y maracuyá; también está el Spritz Passion Frutos Rojos, con Aperol, frutos rojos, espumante brut y tónica; y el L´gancia, a base de Aperol, syrup de remolacha y jugo de lima. Los precios de estos oscilan entre los $ 400 y los $ 420. También ofrecen uno que se llama Viveza criolla y tiene almíbar de pepino, Aperol y cerveza para $ 380. “Hay que adaptarse y no quedarse solamente en los clásicos, por eso tenemos versiones con distintas frutas que a la gente le gusta mucho”, señaló el bartender.

En la zona del Puerto del Punta del Este, los bares y boliches que siempre fueron un clásico de la noche se vienen acomodando a las nuevas reglas: a las 00 horas deben tener sus puertas cerradas, una de las medidas dispuestas por las autoridades en el marco de la pandemia de coronavirus. Como consecuencia, notan algunos cambios en su público: destacan, sobre todo, cómo incide el hecho de que este año sea casi exclusivamente turismo interno.

Santiago Claramunt, uno de los dueños de Soho, contó a El País que al ser todos uruguayos lo que se pide es lo clásico: “El Gin Tonic sigue fuerte, como el año pasado. Si hubiera sido una temporada como las anteriores se hubiera lucido más. La gente lo pide mucho porque es refrescante y además lo toman de todas las edades, desde jóvenes hasta señoras grandes”.

Claramunt agregó que esta temporada es diferente, que los clientes se están “acostumbrando a los cambios” y que, por la situación, “muchos deciden no salir, porque todo termina temprano, porque se piensan que va a estar lleno, entonces se reúnen a veces en las casas con amigos. Pero con los que llegan, notamos que se ha vuelto un poco a lo tradicional; el uruguayo es novelero con cosas que, tal vez para nosotros ya habían quedado un poco atrás. Se volvió a lo que es la coctelería de verano, como el mojito frozen, la limonada frozen, los daiquiris”.

En Moby Dick, también en la zona del puerto, el jefe de barra Leandro Romero comentó que el Aperol y el Gin Tonic se mantienen entre los más pedidos, en la línea que viene desde el año pasado. Coincidió en que los brasileños, argentinos o estadounidenses eran los que pedían otro tipo de preparaciones con bebidas o marcas puntuales que no son tan comunes, pero que este verano también cuentan con una carta con “tragos de autor, con mucha fruta o con especias que también gustan mucho”.

Camilo, barman de Moby Dick Pub, agregó que “generalmente lo que está saliendo mucho son caipirinhas, mojitos, los más clásicos. Mucho Aperol Spritz, que está bueno para cuando hace calorcito, tanto para el día como para la noche. Lo que tiene de bueno este trago es que tiene poca concentración alcohólica y es bien fresquito”. En promedio, los cócteles salen entre $ 280 y $ 380, “depende mucho de la espirituosa o el destilado que se le ponga”, explicó.