TORNEO APERTURA
A cuatro días del encuentro por la fecha 12 el partido se cambió del Suppici a Paysandú, pero el mismo día la Mesa Ejecutiva lo devolvió a territorio coloniense.
A solo cuatro días de que se dispute el partido entre Plaza Colonia y Peñarol, trascendente para los aurinegros al estar en la lucha por el título, se cambió dos veces el escenario del juego correspondiente a la fecha 12 del Torneo Apertura. La Mesa Ejecutiva aceptó este lunes que se juegue en el estadio Artigas de Paysandú luego de haber fijado en forma provisional el Alberto Suppici coloniense, pero al final de la tarde lo devolvió a este último estadio.
¿Qué pasó? La discusión viene desde hace días, porque Plaza quiere jugar en tierras sanduceras por una cuestión económica. Carlos Manta, uno de los gerenciadores de Plaza, fue claro al respecto: "En Paysandú podemos recaudar 100.000 dólares y en Colonia, 30.000 por una cuestión de capacidad", dijo. Quizás ese debería haber sido el planteamiento original, aunque políticamente no quedaba correcto. Por lo tanto, surgieron apreciaciones y frases que, con el cometido de cuidar las formas y de no herir susceptibilidades, comenzaron a generar molestias.
Las buenas experiencias de Rentistas al llevar al Estadio Artigas sanducero a Peñarol y luego de Cerro Largo de llevar a Nacional hacen que se intente replicar ahora por Plaza. Se ha descubierto un muy buen mercado en el departamento del litoral norte, que llegó a tener hasta dos clubes profesionales en Primera (Paysandú Bella Vista y Paysandú FC) y que está ávido por ver los partidos de los grandes. Así comenzó todo.
Para justificar el hecho de sacar el partido de Colonia (Rentistas y Cerro Largo lo hicieron porque sus estadios están en remodelación) se comenzó a cuestionar algunos elementos del Suppici: que la luz no es buena para televisar, que la última vez que fue Peñarol (en pretemporada para enfrentar a Ñublense) hubo apagón o que faltan baños para los visitantes.
Por su lado estuvo también la presión política ejercida por Peñarol, que no quiere tener que trasladarse hasta el norte (son tres horas más de viaje) porque el martes debe afrontar un partido muy importante (de local) contra Cerro Porteño por la Copa Libertadores. Sin embargo, en el fondo de la cosa hay un tema de principios que defiende la institución aurinegra. Le ocurrió algo similar cuando tuvo que ir a Paysandú para enfrentar a Rentistas.
Se le fijó el escenario pocos días antes y el club tuvo que cambiar toda su planificación logística, porque cuatro días más tarde debutaba en la Copa Libertadores ante Colón en Santa Fe. Por lo tanto, desde Paysandú viajó a Entre Ríos, donde se alojó dos días antes del partido continental.
Entonces Peñarol aceptó —de mala gana— tener que desplazarse hasta Paysandú, pero presentó una enérgica protesta y pidió que no se volviera a repetir. Pues bien, pocas semanas después la situación es la misma. Por eso Ignacio Ruglio, presidente carbonero, indicó: "No pretendo que Peñarol se lleve de pesado a nadie, pero que no nos quieran llevar de pesado a nosotros". En declaraciones al programa Quiero Fútbol (Sport 890) el titular aurinegro explicó que si Plaza aduce cuestiones de dinero, también Peñarol lo hace, porque si queda afuera de la Libertadores se perderá un millón de dólares.
Finalmente, respetando la voluntad del equipo local (Plaza), la Mesa Ejecutiva de Primera División decidió aceptar su pedido de que el partido se disputara en el Estadio Artigas de Paysandú. Sin embargo, nunca fue oficializada esa decisión y este mismo lunes a la tarde se decidió mantener el Suppici.
El motivo de tal determinación fue que la Intendencia de Colonia no quiso quedarse al margen por aquello de que el que calla otorga. Entonces, envió este lunes una carta a la Mesa Ejecutiva en la que explicó que el Suppici tenía todas las condiciones para recibir el partido Plaza Colonia-Peñarol. Ante esto, el órgano administrativo de la AUF se reunió y mantuvo el escenario coloniense fijado inicialmente.
Lo que puede dejar esta situación es, además de una recaudación inferior a la que aspira Plaza, una grieta entre el club que representa a Colonia en el fútbol profesional y el gobierno departamental. Pero también otra en el seno mismo de la AUF, porque los integrantes de la Mesa se sintieron burlados por el club coloniense, dado que los argumentos que dio para que le cambiaran el escenario se cayeron ante la comunicación de la Intendencia.