COPA DEL MUNDO
El edificio ofrece un recorrido entre galerías que reúnen la historia en el desierto, el establecimiento del estado, la llegada del petróleo y un sinfín de artefactos y vestimentas típicas.
En los días sin fútbol, es uno de los paseos obligados para los fanáticos que llegaron al Mundial de Qatar 2022. Más aun para los que ya hace un mes que están en Doha y recorrieron los puntos claves de esta ciudad. El Museo Nacional impacta arquitectónicamente a los turistas y es la mejor manera de mostrarles a ellos la identidad del país.
El museo original fue inaugurado en 1975 y restaurado en 2019 con el diseño del francés Jean Nouvel. El arquitecto se inspiró en el cristal de la rosa del desierto para darle forma al lugar. En este sitio también se encuentra el Palacio Real del Jeque Abdullah Bin Jassim Al Thani, un monumento histórico.
"Imaginar una rosa del desierto como base para el diseño fue una idea muy avanzada, incluso utópica. Para construir un edificio con grandes discos curvos, intersecciones y ángulos en voladizo, el tipo de formas hechas por una rosa del desierto, tuvimos que enfrentar enormes desafíos técnicos. Este edificio está a la vanguardia de la tecnología, como el propio Qatar. Como resultado, es un objeto total: una experiencia que es a la vez arquitectónica, espacial y sensorial, con espacios en su interior que no existen en ningún otro lugar", explicó Nouvel en su apertura.
Este espacio, que representa el corazón del país, busca mostrarle a los visitantes su historia, cultura, patrimonio y principalmente el futuro hacia donde se dirige Qatar.
El Museo Nacional ofrece un largo recorrido entre galerías que cronológicamente reúnen la historia en el desierto, el establecimiento de Qatar como estado, la llegada del petróleo que cambió la vida del país y un sinfín de artefactos, joyas y vestimentas típicas. Hay aproximadamente 8.000 objetos.
El paseo completo por estos 40.000 metros cuadrados dura al menos unas tres horas. El museo cuenta también en cada galería con videos, en pantalla de cine, para acompañar la experiencia y contar en primera persona, en la voz de los mismos qataríes, la historia de su país. Los videos están en árabe y subtitulados en inglés.
De todas maneras, en estos días, en los pasillos del Museo Nacional de Qatar se habla español casi sin excepción. Es que los argentinos que coparon Doha y esperan para la final del domingo con Francia, están haciendo el pasar tiempo para matar la ansiedad. Por eso es normal por estas horas ver los pasillos del museo, entre su luz tenue y cálida, que se destaquen las camisetas albicelestes.
El museo apunta a captar la atención de los turistas no solo por sus objetos históricos sino por los efectos visuales y sonoros que acompañan el recorrido y hacen que el visitante se sumerja en esa energía para compenetrarse y entender de primera mano la historia y la cultura de Qatar.
En 2019 la revista estadounidense Time catalogó al Museo Nacional de Qatar como uno de los mejores sitios para visitar en el mundo.