EUROPA

En 2008, un joven portugués de 23 años concretaba la amenaza que había hecho el año anterior: ganar el Balón de Oro. En 2007 se lo había llevado el brasileño Kaká, pero un tal Cristiano Ronaldo había sido segundo y ya deslumbraba defendiendo al Manchester United. Detrás suyo, a una cantidad importante de puntos pero no tanto de votos, aparecía como delantero de Barcelona otro chico más joven aun (21) pero tan promitente como el luso: Lionel Messi.

Nacía entonces —aunque no se sabía todavía— una gran rivalidad que ya lleva 15 años, la cual además se vio alimentada desde que CR7 aterrizó en Real Madrid, el acérrimo rival del Barcelona de La Pulga. Durante todo este tiempo entre ambos ganaron 12 de las 13 últimas ediciones del Balón de Oro: Messi ganó 7 y Cristiano 5. Solo el croata Luka Modric, en 2018, logró meterse colarse en los dominios de ambos.

Sin embargo, ese reinado que se han alternado el argentino y el portugués parece estar llegando a su fin. Es verdad que Cristiano ganó el Balón de Oro en 2019 y que Messi lo hizo en 2021 (por la pandemia no hubo premio en 2020, aunque extraoficialmente el premio lo ganó el polaco Robert Lewandowski), tanto como que fue muy discutido que se le haya otorgado al argentino en la última edición y como que ninguno de los dos son capaces de resolver por sí mismos los partidos, salvo en casos aislados como el del portugués el pasado fin de semana, cuando hizo un hat-trick con el cual Manchester United vencio 3-2 a Tottenham, goles que le permitieron establecerse como el máximo anotador en la historia del fútbol mundial con 807 tantos.

Incluso parece haber un leve matiz a cómo han reaccionado sus exequipos cuando ellos se marcharon. Veamos ambos casos:

El 26 de mayo de 2018 Cristiano Ronaldo ganaba su quinta Champions League personal y la cuarta con Real Madrid (su primera había sido con Manchester United), pero llamativamente días después sorprendió al mundo anunciando su fichaje por Juventus, donde estuvo tres temporadas. Desde entonces el conjunto madridista no ganó más la Champions: quedó eliminado en octavos en las dos siguientes ediciones a su partida, llegó a semifinales en 2021 y en la actual está en cuartos de final.

Juventus, con CR7, llegó a cuartos en 2019 y no pasó de los octavos en 2020 y 2021. Con su mudanza de regreso a Manchester, Cristiano (hoy de 37 años) pensaba en reverdecer viejos laureles, pero hasta ahora ha sido un fracaso. El equipo acaba de quedar eliminado en octavos de Champions a manos de Atlético de Madrid y en Premier League está quinto, fuera de zona Champions y con tres partidos más jugados que Arsenal, que está cuarto un punto por encima suyo.

La noticia de la partida de Messi de Barcelona fue la bomba de 2021. Se esperaba que allí terminara la carrera que comenzó en octubre de 2004, cuando debutó con la camiseta blaugrana, pero luego de amagar un par de veces y quedarse, pegó el portazo y se fue al Paris Saint-Germain para jugar junto a su amigo Neymar.

Barcelona lo extrañó tanto que en su primera temporada sin él no superó la fase de grupos de la Champions League y tuvo que bajar a jugar la Europa League, en la que este jueves 17 disputará el partido de vuelta por octavos de final como visitante ante Galatasaray, con el que igualó 0-0 en la ida jugada en el Camp Nou. Es decir: fracaso absoluto.

Para peor, en LaLiga de España está a 15 puntos de Real Madrid, aunque al menos en la tercera posición en zona Champions. Con la llegada de Xavi a la dirección técnica el equipo ha repuntado.

La llegada de Messi a PSG para formar la delantera con Neymar y Kylian Mbappé ponía al conjunto parisino como candidato al título, pero no pasó de octavos de final y eso provocó un desencanto tan grande que el pasado fin de semana, en el triunfo 3-0 sobre Bourdeaux por la Ligue 1, el argentino y el brasileños fueron silbados cada vez que tocaron el balón. Y eso que en Francia llevan 15 puntos de ventaja en el primer lugar sobre Olympique de Marsella, su más cercano perseguidor.

Todo lo anterior abona el camino de la importancia que tenían Cristiano y Messi para sus equipos, pero sus presentes no son los mejores. El portugués completó su tercera eliminación consecutiva en octavos de final de Champions y el argentino la segunda.

Cristiano lleva convertidos 18 goles en 31 partidos, una muy buena cifra, ya que significa una media de 0.58 tantos por juego. Messi, en cambio, lleva solo 7 goles en 26 partidos, con una media de 0.27. El cambio le cayó mejor al luso que el rioplatense, pero colectivamente le fue mejor a este último.

Como sea, sería muy extraño que el próximo Balón de Oro fuera para uno de ellos, aunque claro, de por medio estará el Mundial de Catar para el cual Messi ya está clasificado, en tanto Cristiano todavía tiene que luchar por el boleto en repechaje ante Turquía.