MUNDIAL
Los vecinos sudamericanos se hicieron sentir en el primer día de la Copa del Mundo, pero Carmen y Daniel sacaron la cara por Uruguay.
El primer día del Mundial de Qatar 2022 tuvo dos grandes contrastes en la tarde del domingo en Doha. Por un lado, muchas calles se encontraban casi vacías y era lógico. Todos querían ver la inauguración y el estreno del equipo local, el único debutante de los 32 seleccionados, ante Ecuador. Al mismo tiempo, el aeropuerto de Doha vivía uno de sus días más cargados recibiendo fanáticos de todas partes del mundo. Todos los hinchas traían sus distintivos, no había necesidad de averiguar de qué país venía cada uno.
Los mexicanos se movían como una marea verde, los ingleses (mucho más discretos) se hacían notar con algún gorro con el escudo de la selección, pero nadie podía superar el ruido que hacían los argentinos y brasileros.
El equipo de Ovación hizo escala en San Pablo y quedó en el medio en el avión entre ambas hinchadas. Tras algunos cánticos con buena onda en la previa, los albicelestes aterrizaron en Qatar dejando en claro que se tienen mucha fe para alcanzar en esta edición su tercera Copa del Mundo: “Vení, vení, cantá conmigo, que un amigo vas a encontrar, que de la mano de Leo Messi, todos la vuelta vamos a dar”.
En el avión también vino una pareja de uruguayos que a pesar de ser minoría, sacaron pecho con ropa de la Celeste. Carmen y vinieron desde Atlántida y estarán junto a otros 1.200 uruguayos alentando a la selección de Diego Alonso el próximo 24 ante Corea del Sur en el arranque del Grupo H.
“Un viaje largo, cansador, pero acá estamos para vivir la fiesta del Mundial. Esperemos que Uruguay salga campeón”, señaló Daniel.
Carmen acotó: “Aprovechamos las oportunidades del fútbol para poder pasear. Es una cultura diferente, un lugar diferente, venimos a disfrutarlo y a conocerlo”.
Carmen y Daniel también tienen pensado visitar la región una vez que termine la aventura celeste. Eso sí, confían plenamente en el equipo del Tornado y tienen asegurada su estadía en Doha hasta el cierre del Mundial.
La pareja uruguaya se fue rápidamente del aeropuerto para llegar a tiempo al Fan Fest para presenciar la inauguración del Mundial; pero no pasaron inadvertidos. “¡Vamo arriba!”, bromearon unos argentinos cuando los vieron. “Somos pocos, pero buenos”, respondió Daniel con una sonrisa.